martes, 30 de septiembre de 2025

DE VIRIS ILLUSTRIBUS

 

DE VIRIS ILLUSTRIBUS

Las comunidades han necesitado desde siempre ejemplos y referencias, espejos en los que mirarse, modelos para ser imitados. Desde el macho alfa de la manada primitiva hasta el ejemplo más refinado por su cultura y por su actividad social o intelectual en otras épocas.

Los ejemplos se han ido modelando a lo largo del tiempo y las características de esos ejemplos se han ido adaptando a los valores que la sociedad ha ido imponiendo, o se ha dejado imponer por poderes superiores. No es lo mismo un modelo primitivo de buen cazador que un modelo de guerrero espartano, o que un cultivador exquisito de virtudes religiosas, ni que un modelo de científico creador de elementos de ayuda para la sociedad, o un deportista actual... Apasionante resulta echar tan solo una mirada a esa panoplia de modelos para entender cómo se han ido confeccionando las escalas de valores y tal vez para quedarnos sorprendidos por ello.

Uno tiene la impresión -por no asegurar que la evidencia- de que hoy se llevan la gloria aquellos ejemplos que mejor saben explotar la pasarela pública y que mejor saben vender el producto a una sociedad que se alimenta de imágenes vacías y de ráfagas aisladas. O sea, de apariencias, en todas sus variedades.

Pero la paleta cromática es muy variada y el arco iris admite muchos tonos. Quiero decir, claro, que no todo es o blanco o negro; que no todo es solo apariencia y que hay ejemplos que demuestran lo contrario.

Los ayuntamientos suelen distinguir a algunos de sus vecinos con reconocimientos públicos que suponen para los premiados algo así como ponerlos en un pequeño pedestal para que sirvan de ejemplo ante los demás miembros de la comunidad. Se convierten en algo así como ´ciudadanos ilustres´, al modo de aquellos viri illustres clásicos tan celebrados en obras que llevan el título de De viris illustribus.

Supongo que establecer los reglamentos y los protocolos para esas designaciones no debe de resultar nada sencillo. ¿Qué perfiles son los que van a ser premiados? Después de haber elegido esos perfiles, ¿a quién dejas fuera, si siempre hay varias personas que pueden merecer esos honores? Si te presentan un candidato, ¿cómo te atreves a dejarlo fuera con tu voto negativo? ¿Hay que atreverse alguna vez a dejar alguno de estos premios desierto? Y así una ristra de preguntas. No, no debe de resultar sencillo esto de la designación de premiados. Aunque, en resumen, mejor será pecar por exceso que por defecto.

En Béjar creo que este año han acertado de pleno al premiar a vecinos que se han destacado sobre todo en actividades que tenían como finalidad el provecho no propio, sino de los demás ciudadanos. Dicho de otro modo, la solidaridad -además de otras cualidades- ha sido reconocida en las personas que visiblemente la han practicado y la siguen practicando. Por eso, mi reconocimiento y mi enhorabuena para ellos. En este caso con nombres y apellidos: Abejarock y sus organizadores, Festival de blues y la familia Sánchez Paso, Luis Felipe Comendador, Juan Hernández Heras, Nayerda Slujalkovsky. Y tras ellos, para todos aquellos que no han sido premiados, pero que ejercen en el silencio la ayuda y el ejemplo con su vida y su escala de valores.

Como le comenté a uno de los premiados, este puede que sea uno de los reconocimientos más bonitos y que produzca mayor satisfacción, porque viene de la mano de los vecinos, de las personas más próximas, de aquellas con las que se convive y en quienes más y mejor puede lucir el ejemplo para ser imitado.

Inevitable para mí recordar el premio que en los primeros años del siglo pasado ya se concedía, por suscripción popular, en la revista bejarana Cultura y Tolerancia, dirigida por el anarquista José María Blázquez de Pedro, nada menos que «A la mujer más buena»

Este es un caso más en el que se cumple aquella afirmación unamuniana de que «Nada hay más universal que lo individual, pues lo que es de cada uno lo es de todos».

Así, de nuevo, lo que parece anécdota se nos convierte en categoría y en guion de pensamiento para cualquiera en el espacio y en el tiempo. Dicho de otra manera, que lo que se predica para esta ciudad estrecha y para el año presente sirve para cualquiera otra y en cualquier momento.

No hay comentarios: