viernes, 24 de julio de 2020

SANTA SOFÍA, AGIA SOPHIA, AYASOFYA



SANTA SOFÍA, AGIA SOPHIA, AYASOFYA
Hace apenas dos años que visité por primera vez la mezquita-iglesia de Santa Sofía en Constantinopla o Estambul. Antes, en numerosas ocasiones la había contemplado en imágenes, la había asimilado a los distintos estilos arquitectónicos y hasta había escrito algunas líneas de exámenes acerca de esta maravilla. Cuando la visité (aquí mismo dejé constancia escrita de mis impresiones) estaba en obras, pero en nada le hurtaban su grandiosidad y, menos aún, su simbolismo.
Hoy leo que la restauración ha concluido y que se ha aprovechado el momento para una nueva inauguración y la proclamación y consagración como mezquita. Las máximas autoridades del país han acudido para darle más boato al acontecimiento. Los representantes culturales de medio mundo han mostrado su descontento ante lo que adivinan que supone realmente este hecho.
Este monumento grandioso ha pasado por ser catedral ortodoxa, catedral católica y mezquita musulmana. Más de 1500 años la contemplan y varios estilos arquitectónicos se mezclan en sus muros y cúpulas. Sus características artísticas están muy glosadas por todas partes y nada podría yo añadir.
Solo quiero apuntar una consideración acerca del valor simbólico que atesora. No creo que el presidente de la República ni tantos miles de personas se hayan concentrado solo para ensalzar el valor artístico del monumento. Por encima de ello parece oírse la reivindicación del carácter musulmán del lugar. Otra vez el palo y tente tieso en nombre de la religión. Nos pasa en Córdoba, les pasa en Jerusalén y pasa en muchos otros sitios en el mundo. En nombre de la religión se mata, se alza la voz, y, sobre todo, se esconden otras muchas mentiras y miserias humanas
Las intenciones de Kemal Atatürk de levantar un país laico en Turquía dan un paso más hacia atrás. Ojo, y estamos hablando de las religiones del Libro, esa tres que tienen en su vértice un dios que se dice misericordioso, pero también justiciero. La mejor cuña sigue siendo la de la misma leña.
Para disimular, se apunta al valor universal y a la acogida ocasional de otras religiones en este lugar sagrado. Puro engaño. En España este truco lo conocemos bien.
Agia Sophía, Santa Sofía… Bendita y santa sabiduría. Si su nombre nos encaminara más hacia la sabiduría y menos a la exclusión y al rechazo… Pero, ¿qué dios es ese que, siendo el mismo, se subdivide y se enfrenta con sus heterónimos y alias, y, aun peor, que empuja a sus fieles para que se maten unos a otros? Puro disparate.

jueves, 23 de julio de 2020

SONETO MOSTRENCO Y DE DESTINATARIO ¿INDEFINIDO?


SONETO MOSTRENCO Y DE
DESTINATARIO ¿INDEFINIDO?

Dicen que aquel que llega hasta los treinta
y afirma: “me la sudan los antojos
del tiempo, la salud y la conciencia”                                          
es bobo, imbécil, majadero y tonto.

Otros piensan que no hay que poner cuenta,
pues cada edad se rige por su código
y que no son lo mismo ocho que ochenta
si se tiene la vida por castigo.

Yo digo que, en verdad, ninguno acierta
y pido que en la edad en la que estemos
-no importa si cuarenta o si setenta-

prestemos atención a lo que hacemos,
compartiendo derechos y deberes
con siete mil millones de congéneres.

Hay peligros que acechan y no entienden
de edades, de prudentes o imprudentes.

miércoles, 22 de julio de 2020

J(F)UEGO DE ESTÍO



J(F)UEGO DE ESTÍO

La tarde es un incendio en el estío
y el cielo es luz y fuego. Si tuviera
la sed que a tu frescor me condujera
para sentir el bálsamo del frío.

Me vería, si acudiera, sorprendido:
sentiría, en vez de frío, como una hoguera
que en su llama de amor me consumiera
hasta llevar mis penas al olvido.

Que me mata el calor si es del verano
y prefiero quemarme entre tus llamas,
en gigantesco incendio provocado.

No soporto ese frío que me regalas
cuando miro tus ojos y tus manos.
Haga frío o calor, siempre me matas.

lunes, 20 de julio de 2020

CON ESTOS MIMBRES...



Hace once años escribía en mi blog esta entrada. Creo que tiene rabiosa actualidad. Apenas he suprimido un par de párrafos.
2009/08/05                                 CON ESTOS MIMBRES…

Desde mi cama, escucho las noticias de Béjar en la Cadena Ser. Son solo unos minutos. La concejala de Medio Ambiente trata de explicar las actuaciones que se están llevando a cabo con los estorninos en el Parque Municipal. Oyéndola, tenía la impresión de que, realmente, no saben cómo quitárselos de encima. Sus explicaciones me parecen imprecisas y poco resolutivas. Es evidente que hay normas que cumplir y que ella tiene que ser una de las personas más cuidadosas con el medio ambiente y con el respeto a los animales. Pero creo que nos equivocamos cuando extremamos el celo, y que gobernar implica tomar decisiones, también con el riesgo de equivocarse (errare humanum est, y más se perdió en Cuba).
Hay una idea que me parece absolutamente fundamental para actuar en la vida: la de jerarquizar actuaciones, la de dar prioridad a unos hechos sobre otros. Si no se actúa así, corremos el riesgo de convertir todo en un caos o el de quedarnos indefensos ante todo por no actuar nunca. Es la mejor fotografía, además, de una escala de valores determinada.
Para este caso concreto, parece evidente que las personas, en su salud y en su distracción y esparcimiento, están por delante del derecho de los estorninos a dormir por la noche. El lugar que ocupan, los árboles que destrozan, la insalubridad que provocan, la imposibilidad de pasar y de pasear bajo esos árboles, la cantidad de agua que hay que gastar cada mañana para limpiar esos lugares, la cantidad de horas de trabajo y el dinero que eso supone… son razones suficientes como para actuar, y para hacerlo con urgencia.
Quede pues servida en crítica Elena, la concejala de Medio Ambiente, persona que, por lo demás, me parece con cabeza suficiente como para “dar salida” a estas dificultades y a otras muchas. Y quede clara también mi postura activa ante la necesidad de actuar contra esta plaga de estorninos, aunque se tengan que utilizar métodos no del todo exquisitos.
Pero había una guinda escondida en el pastel que aún no había aparecido en los minutos de la emisión. La oyeron mis oídos y la saborearon mis papilas gustativas. Quiero decir que esta vez no me caben interpretaciones ni conjeturas desconfiando de los periodistas, por si hubieran manipulado la noticia o la hubieran sacado de contexto. La encargada del programa puso un “corte” en el que el antiguo regidor, Alejo Riñones Rico, pronunciaba estas palabras sobre el asunto de los dichosos pájaros: “A nosotros, cuando gobernamos, nos costó mucho echarlos, pero lo conseguimos. SABEMOS CÓMO ECHAR A LOS PÁJAROS, PERO NO SE LO VAMOS A DECIR A ESTOS”. Si alguno leyera estas palabras, por favor, que me crea. Exactamente esto es lo que dijo el exregidor. Alejo Riñones, contra el que, como persona, no tengo nada, y de quien me gustaría ser amigo, como de todo el mundo, fue alcalde de la ciudad estrecha en la que vivo DOCE AÑOS y sigue siendo (no sé cuántos años ya) PROCURADOR EN LAS CORTES DE CASTILLA Y LEÓN.
Me entró la risa floja cuando oí tal memez y semejante tontería. Al poco, me puse triste y me tiré de la cama: me aguardaban la lectura y los parajes de Puente Nueva.
No entré a considerar la verdad o mentira de lo que afirmaba porque sencillamente con preguntar al empleado municipal correspondiente se puede conocer cuál fue la fórmula que dio resultado en otras ocasiones para que se fueran los pájaros; algo tan sencillo y elemental como eso. Me reía y me entristecía a la vez por el nivel ínfimo de capacidad intelectual que demuestran algunos de los representantes públicos. Aún ahora (son las cinco de la tarde), recuerdo sus palabras y no sé cómo reaccionar. Los niños jugando al ratón y al gato no lo harían peor. Así que hay un señor que conoce una fórmula para librar a los vecinos de una molestia grave como es la de la plaga de estorninos y no se la da a conocer a sus adversarios políticos. ¿Qué puede tener en su cabecita política? Lo dijo don Antonio Machado sabiamente: “El mundo en la oquedad de su cabeza”.
Por desgracia, el hecho viene a demostrar, una vez más, la forma en la que algunas ¿ideologías? conciben esto del asunto público: si yo gano, todo para mí y usted váyase a casa; si gana usted, apáñeselas como pueda.

 Pensaba Platón que la mejor forma de prepararse para la vida pública era la de curtirse en el mundo de la filosofía. Aristóteles defendía que la política es la continuación y la culminación de la ética. No sé si no tendríamos que abrir alguna academia de rudimentos de filosofía, ética y sentido común para por las tardes. Sugiero empezar por los más necesitados: hay legión.

viernes, 17 de julio de 2020

CARA A


CARA A
Para romper la línea de las últimas semanas, y no sé si muy convencido del todo, estas palabras de optimismo, que no son otra cosa que una cara distinta de esta vida poliédrica y desigual que vivimos.
La vida como suma de regalos
que proceden de un fondo indefinido.
Así la vida entera, como fiesta,
celebración de dones imprevistos.

Nacemos a la vida en un milagro
que cumple los designios de un lenguaje
con un abecedario misterioso,
y ya todo es conciencia y beneficio,
incluso en el dolor y en la desgracia,
pues ambos son constancia y certidumbre
de que la vida existe y que se ofrece
para que yo la viole y la consuma
en un acto de amor interminable.

Aprender a leer y a conformarse
con balbucir los signos imprecisos
que la vida regala a cada instante.

jueves, 16 de julio de 2020

EL JUICIO Y EL LAMENTO


EL JUICIO Y EL LAMENTO

“La filosofía arranca del primer juicio. La poesía, del primer lamento”. Tal cosa escribe y afirma el poeta León Felipe. ¿Tiene razón? ¿Tiene razones? ¿Cuántas y cuáles? ¿Tiene solo parte de razón? ¿Es un disparate?

Como me sucede casi siempre, no tengo respuesta definitiva. Se me disculpará un poco más a mí, que escribo y creo poesía bastante reflexiva, en la que se mezclan las emociones con las razones.
Tal vez, como tantas veces, casi todo se dilucide en los grados de un ingrediente y de otro. No discutiré que la filosofía se nutre de la razón y en ella encuentra sus límites. Tampoco que la poesía crea un mundo paralelo en el que la emoción (en forma de lamento o de alegría o de sorpresa o de cualquier otra variable) señala el camino y mantiene la exigencia.

Pero la filosofía, en su trabajo racional, encuentra nuevas conclusiones, y en ellas se recrea y hasta se emociona. La poesía, ya sea en su proceso de conocimiento o de comunicación, también tiene que basarse en un referente, primario o final, que deje al creador situado en unos parámetros legibles e interpretables.

Si un lector se detiene en el filósofo Hume, por ejemplo, al final de la lectura tiene que sentir -y no solo pensar- que algo en su interior se ha removido. Si lo hace con el poeta san Juan de la Cruz, su escala de valores emocional se habrá sometido a alguna reconstrucción o afirmación de tipo racional.

Da, pues, la impresión de que filosofía y poesía recorren el mismo camino y en él se cruzan y se dan la mano. Cada una con su vestimenta y con su horario de trabajo. Cada cual con su herramienta, pero ambas con una meta bastante próxima.

Lo importante es que ambas nos deberían mostrar un mundo más claro, más humano y más ilusionante. O lo contrario, porque los resultados no los conocemos nunca hasta que finaliza el proceso.

martes, 14 de julio de 2020

¿QUIÉN SOY?



¿QUIÉN SOY?

¿Quién soy yo?, me pregunto si, confuso,
me siento a meditar en mi terraza.

A veces no conozco ni mi nombre.

Nacemos y nos nombran, nos señalan
con dedo singular que nos identifica.
La vida va borrando en su espesura
esa señal prendida en la solapa,
la va haciendo difusa y la emborrona,
nos llama a definir nosotros mismos
las nuevas acepciones que la habitan.

Cuando llega la tarde y vienen sombras,
y se intuyen señales de la noche,
intentamos de nuevo bautizarnos
dejando en las palabras la pregunta
del posible valor de nuestras huellas.

Es el viento el que aventa las palabras,
pone nombre a las cosas y organiza                      
el orden desigual del calendario.
En él me busco y miro por si acaso
pudiera descubrir si sigo siendo,
si fui tal vez o acaso nunca he sido
más que un eco sin huellas de mi nombre.

lunes, 13 de julio de 2020

DESASOSIEGO


DESASOSIEGO
Ayer, a media tarde, entre la sombra de los robles y paseando, alguien me preguntaba por el desarrollo de las elecciones vascas y gallegas. Respondí que no estaba interesado en nada. Y no era verdad. Tal vez lo hacía porque los resultados estaban casi cantados o porque no quería hacer sangre en la herida de mi desánimo.
Solo dejaré nota de mi sensación y a otra cosa:
1.      Las elecciones en estos territorios no deberían tener más importancia que las que se celebran en otras comunidades autónomas. ¿A qué viene tanto bombo en los medios estatales?
2.      Cualquier proceso electoral es la de muchas variantes; todas son importantes, pero unas más que otras. Hay que saber jerarquizar para distinguir el polvo de la paja.
3.      A mí me parece que la conclusión más importante es la de que los nacionalismos (en forma cubierta o encubierta –Feijòo se apartó de las siglas del PP-) y los independentismos siguen al alza y esto no tiene visos de ser atajado, ni en el sentido positivo ni en el negativo de la extrema derecha. O sea, que todo se radicalizará aún más. Enseguida tendremos un nuevo ejemplo en Cataluña.
4.      Los nacionalismos y soberanismos alcanzan tanto a la derecha (PNV), como a las llamadas izquierdas (EH Bildu, BNG), y, a media voz, a parte del PSOE.
5.      Yo sigo sin comprender cómo se puede uno considerar de izquierdas y ser nacionalista o independentista. A mí todo esto me huele a egoísmo y prefascismo. Sé que son palabras duras, pero así lo pienso y lo declaro. Me gustaría que alguien, con buena voluntad me lo explicara: estoy dispuesto a escuchar y hasta a comprender.
6.      Cada día me parece más evidente, si esto es posible, que el asunto territorial es condición previa para cualquier otra discusión o aplicación de códigos. En consecuencia, sin arreglar este asunto, me parece que todo irá a peor y el desánimo cundirá aún más que por la desgracia de la pandemia.
7.      Si tuviera razón en lo que digo, que alguien piense en las consecuencias emocionales y políticas que puede acarrear en condicionar votos en las fuerzas políticas más extremas.
8.      El fracaso electoral de Podemos parece venir a confirmar que con la concepción territorial no se juega: o se es o no se es. Vuelvo a recordar aquella famosa frase de Pablo Iglesias: ¿Aquí cómo nos llamamos? Pues eso.
9.      Parecida falta de definición es aplicable a una buena parte del PSOE, sobre todo en la periferia. Cuando el bueno de Iceta pide más competencias, ¿a qué y a cuáles se refiere? Por ejemplo.
10.  La vida es evolución y nada es inamovible. Habrá que volver a analizar los principios básicos y saber si se cree en ellos. Si es así, hay que seguir defendiéndolos a cara descubierta y a mente despejada. Las medias tintas no dan buen resultado. Sin amenazas ni exclusiones, pero sin complejos.
11.  Si no, todo vuelve a recordar aquellos versos: De todas las historias de la Historia, / sin duda la más triste es la de España, / porque termina mal. Como si el hombre, / harto ya de luchar con sus demonios, /decidiese encargarles el gobierno / y la administración de su pobreza.
¿Por qué tanta fuerza egoísta y centrifugadora y tan poca solidaridad y deseos de bien común?

domingo, 12 de julio de 2020

GRACIAS, PLATERO


 GRACIAS, PLATERO
Con frecuencia y alegando cualquier pretexto, viene a visitarme Platero, aquel burro del sur que se hizo eterno y amigo para siempre de todo el mundo. En cuanto oigo su rebuzno, le abro la puerta y le doy paso, lo acaricio y lo miro minuciosamente desde sus orejotas hasta las pezuñas de sus patas. Nunca lo he visto triste en sus múltiples visitas y siempre lo he considerado como un viejo amigo que quiere pasar un alegre rato conmigo.
Quiero decir, claro, que la lectura de este libro de imágenes y postales moguereñas, que sirven para cualquier museo natural, completa un mar de ternura y de borrachera léxica. Nunca me ha dejado indiferente su lectura. Siempre he visto en él un ejemplo sublime de lo que es un torrente de imaginación en lo externo y en lo interno. De lectura no sencilla si se quiere uno empapar del mar de imágenes que componen cada cuadro y asumirlas todas en nuestra visión particular. Pero, como los niveles de apropiamiento pueden ser muy variados, lo considero una fuente extraordinaria para la aproximación, tanto a la lectura, como a la creación. De su simple imitación, pueden salir pozos llenos de agua fresca y mundos de colores.
¡Cuántas veces Platero ha guiado a mis alumnos en el aprendizaje tanto de la lectura como de la escritura! Me hubiera gustado que lo hubiera hecho también, y sobre todo, en el del camino maravilloso del desarrollo de la imaginación personal. Y, por supuesto, a mí también me ha servido y me sirve de referente.
Por eso las visitas de Platero son tan bien recibidas en mi casa y en mi rincón. Y, cuando el burro se despide, siempre queda emplazado para una nueva ocasión. Porque yo sé que es mentira la muerte de Platero, aunque JRJ se empeñara en pintárnosla de manera tan sencilla como sugerente. Así lo hacía y así lo recojo yo hoy aquí, a pesar de que Platero es y será universal y eterno.
Encontré a Platero echado en su cama de paja, blandos los ojos y tristes. Fui a él, lo acaricié hablándole, y quise que se levantara...
El pobre se removió todo bruscamente, y dejó una mano arrodillada... No podía... Entonces le tendí su mano en el suelo, lo acaricié de nuevo con ternura, y mandé venir a su médico.
El viejo Darbón, así que lo hubo visto, sumió la enorme boca desdentada hasta la nuca y meció sobre el pecho la cabeza congestionada, igual que un péndulo.
—Nada bueno, ¿eh?
No sé qué contestó... Que el infeliz se iba... Nada... Que un dolor... Que no sé qué raíz mala... La tierra, entre la yerba...
A mediodía, Platero estaba muerto. La barriguilla de algodón se le había hinchado como el mundo, y sus patas, rígidas y descoloridas, se elevaban al cielo. Parecía su pelo rizoso ese pelo de estopa apolillada de las muñecas viejas, que se cae, al pasarle la mano, en una polvorienta tristeza...
Por la cuadra en silencio, encendiéndose cada vez que pasaba por el rayo de sol de la ventanilla, revolaba una bella mariposa de tres colores...
Todo sencillez, todo precisión, todo ternura, todo… belleza y hermosura.

viernes, 10 de julio de 2020

...PARA QUE TODO SIGA IGUAL


... PARA QUE TODO SIGA IGUAL
Es la segunda parte de la conocida frase “cambiar todo para que todo siga igual”. Uno tiene la impresión de que es el empeño en el que andamos metidos en estos momentos convulsos.
La pandemia nos ha pillado a todos con el pie cambiado y no sabemos cómo reaccionar para tomar las riendas de esta descomposición. Los de casi siempre encuentran la ocasión propicia para dar palos al muñeco sin considerar contextos ni situaciones. Es su costumbre y su modo de comportarse, pues lo que les vale son los resultados a corto plazo y casi nada o nada los medios para conseguirlos. Pobrecillos. Los otros se ven descolocados y sobrepasados en sus decisiones, pues todo les llueve del cielo sin tener ni paraguas ni chubasquero. De ese modo, asistimos a disputas que dan pena y desaniman a la comunidad, producen desaliento y ponen al enfermo en disposición poco positiva para encarar la enfermedad. Y buena parte de la curación está precisamente en la disposición anímica del enfermo y en el ambiente de unión o de desunión en el que se produzca el proceso de la dolencia.
Por si fuera poco, ahí se asoma ya la gravísima crisis económica, el cambio climático se cuela por todas las rendijas, las discrepancias en algunas de las grandes corporaciones que nos sustentan (UE sobre todo) son evidentes y no nos favorecen precisamente, y todo parece empujar a crear un ambiente de desánimo y de falta de espíritu positivo.
A grandes males, grandes remedios. Es otra frase que conocemos todos. De una crisis se puede salir fortalecido o debilitado. Al fin, crisis significa cambio brusco en el desarrollo de un proceso. El cambio brusco nos ha venido dado; nuestra misión es encauzar ese cambio hacia una solución positiva para cada uno y para la comunidad.
Si la superación de la crisis sanitaria, económica y social la vamos a encontrar en la reapertura rápida de los cauces del turismo y del sector servicios sin control y de una actividad que tiene al país medio año atiborrado de gente y otro medio vacío, volveremos a entrar en la misma situación en la que estábamos antes de la pandemia. No explotar los recursos naturales parece cosa de tontos, pero poner todos los huevos en la misma cesta también encierra el peligro de que se nos rompan y nos quedemos a la intemperie y con un final como el del cuento de la lechera. Diversificación y previsión se llama todo esto. Y tecnificación, industrialización o escala de valores.  Para ello, claro, hay que dibujar un horizonte común al que miremos todos.
Es verdad que la necesidad acucia, que cada día hay que comer dos o tres veces y que esto no admite demoras. Ese es el lugar y el momento de la comunidad, de la solidaridad y de la justicia social. Nadie puede quedarse atrás sin unos mínimos.
Pero dejarnos llevar por esas prisas que nos empujan en el cogote es caer en la tentación de encontrar pan para hoy y hambre para mañana. Los economistas, los filósofos, los sociólogos, los políticos, los barrenderos, los comerciantes…, todos los miembros de la comunidad tienen que ponerse al servicio de una misma idea, la del bien común como fórmula menos mala de convivencia y de superación de las debilidades.
Hay que dibujar un nuevo horizonte, otra manera de encarar el futuro, que sean más solidarios y diversos. Si no encontramos ese nuevo horizonte, moriremos en el intento de cambiar todo para, desgraciadamente, no haber cambiado nada. Esta es una buena oportunidad que no deberíamos desaprovechar. Desde todos los ámbitos, también desde el individual.

jueves, 9 de julio de 2020

HUELLA



HUELLA

Tan solo he de dejar para el recuerdo
la huella desigual de mis palabras,
este pequeño ensayo que, a diario,
va diciendo de mí pequeñas cosas:
el mundo puesto al sol en mi terraza.
Las trato con cuidado y pongo en ello
lo escaso de mis fuerzas y el aliento       
que enciende en mí la llama de la curiosidad.

Constato que, por mucha
ternura que yo ponga en el intento,
el surco y la cosecha serán muestra
de noches de tormenta y de granizo,
junto a restos de paz y de contento,
la pobre exactitud de las palabras
y la duda continua que me habita,
en mezcla provechosa con la dicha
de vuestra compañía en cada página.

En esa compartida convivencia
reposará la faz de mis recuerdos,
lo que ha sido de mí junto a vosotros,
ecos de gratitud, tan solo eso.

martes, 7 de julio de 2020

TRES CELDAS DEL MISMO MÚDULO


TRES CELDAS DEL MISMO MÓDULO

1) Moldear una estatua día a día
y comprobar con pena
que un viento despistado la derriba.
Así el afán continuo y la certeza
de ver cómo la vida se marchita.

2) Me persigue esta pregunta:
¿será la muerte descanso
o será nueva aventura?
¿Quién me soluciona el caso?

3) La noche se queda sola
y se borran los caminos,
en mis sueños adivino
una soledad sonora.

lunes, 6 de julio de 2020

SI DIOS...


SI DIOS... 
Si Dios nos ha concedido
la libertad que nombramos
voluntad, libre albedrío,
¿qué pensará al contemplarnos
tan pobres y desvalidos?
¿Estará desconsolado
y tal vez arrepentido
por no habernos ya creado
para ser desde el principio
amor, fortaleza y canto,
y de ida y vuelta el camino
tal vez habernos ahorrado?

Una vez visto lo visto,
debe de estar desolado
ante error tan desmedido
y enorme desaguisado.

Somos buena gente y fío
en que su error perdonamos
aunque también le pedimos
lo que aquí hemos preguntado.

viernes, 3 de julio de 2020

TARDE DE PLAYA



TARDE DE PLAYA

En la dulce modorra de las tardes
de este julio cargado de cautelas,
tus ojos se declaran playa abierta
donde tomar el sol e imaginarse
un baño de placer. Tiendo en su orilla
 mi cuerpo y mi deseo. Pido a las olas
que acompasen sus ecos con el aire
que sopla tenues brisas de levante
y guarden, cual procede, las distancias
para no molestar. Y allí me quedo
viendo como la tarde nos contempla,
tú playa sin final y yo bañista
feliz y solitario en esa playa
que el mar de tu presencia me regala.  

miércoles, 1 de julio de 2020

COPLAS



COPLAS
Vete a saber por qué, hoy se me caen de las manos estas coplillas, que tienen su saborcillo amoroso y filosófico, a pesar de su aparente levedad, y forman un todo conjunto.

Venir a ganarlo todo
y tenerlo que perder
es ley que domina al mundo
y a mí que respiro en él.

Desde que la vida empieza,
todo empuja a conocer,
mas, una vez conocido,
tiende a desaparecer.

Se canta lo que se pierde,
dijo el poeta una vez.
Yo digo que si se pierde
 es que verdadero fue.

Así que perderlo debo
para vivirlo otra vez,
y así, viviendo y muriendo,
ser entre ser y no ser.

Que entre estos cantos se escuchen
los que dicen tu querer.
Vivir y morir con ellos
y con ellos perecer.