martes, 31 de diciembre de 2024

DE UN CONFUSO BALANCEO

 

                        DE UN CONFUSO BALANCEO

                        Para mis amigos Maica, Manolo Juan y Pepe

Aquel que decidió despedir el año en compañía de unos amigos con los que solía salir al campo hiciera frío o calor y que una vez más acordaron decir adiós a la sombra y recibir al sol para desear que este les fuera acompañando día a día y que se levantó más temprano que otras mañanas pues todavía no había amanecido y las calles no estaban puestas salvo aquellas en las que el agua de la red se iba libremente por las alcantarillas y que espabiló en sus quehaceres pues hizo la cama, desayunó frugalmente y hasta tuvo unos minutos para dedicarlos a la lectura y que a eso de las nueve salió de casa cuando el día apenas saludaba a las calles y a las aceras y que recogió a sus amigos incluso a aquellos que siempre llegaban tarde y que decidieron dejar que el coche los subiera hasta el paraje de Llano Alto y que una vez allí y después de mirar con desconsuelo la sierra y comprobar que no guardaba ni una sola gota de nieve en sus laderas echaron pie tras pie camino de la Peña de la Cruz y que enseguida pegaron la hebra arreglando el mundo y dando cuenta de sus hechos hazañas y naderías y que según subían veían cómo el sol se iba adueñando del paisaje aunque no podía con el suelo cuajado del blanco de la cencellada y que iban admirando el paisaje que a cada paso cambiaba según la perspectiva y que en esas charlas entretejidas de calla y escucha que ahora me toca a mí y un no escuchar y varios sí interrumpir ascendieron sin darse apenas cuenta hasta dar la vuelta a la pista y plantarse en esa especie de llanura en la que se erige esa cruz gigante que no se sabe si bendice o vigila el paisaje que desde ella se divisa y que una vez contemplado este y cumplidas unas fotos se aposentaron en los poyos de una edificación que allí existe y que cara al sol pero sin camisa nueva dieron cuenta de una suculenta mesa compuesta por sopas de ajo canapés y una tortilla de considerables dimensiones con los correspondientes complementos de vino aguardiente y té y que allí sentados siguieron templando gaitas y escuchando música y que los que por allí pasaban miraban con cara de dejarse invitar y de sorprenderse por tan abastada mesa con manjares y que lleno ya su estómago realizaron brindis sobre brindis como si aquello fueran las bodas de Camacho el fin del milenio o de alguna era histórica y que de tanto brindar dejaron los recipientes a buenas noches y más vacíos que cantimplora en desierto y que no tenían ganas de moverse del sitio pues el sol les daba solaz y la lengua se les había desatado y que a pesar de todo tuvieron que recoger los restos de sus pertenencias y que se despidieron del paraje con la sensación de que aquel era uno de los mejores hoteles que podían imaginar y que mira tú por dónde a uno de ellos se le ocurrió que la bajada se podía hacer por el camino llamado de los Registros y que no sirvió de nada recordar que por ese camino el sol estaba más reacio a asomarse y que no hubo manera de convencer al que lo propuso y que enseguida empezaron a notar en sus piernas la bajada y que a eso de medio camino uno de ellos se puso malito de lo suyo y empezó a sentir que el equilibrio era para el circo pero no para su cuerpo y que el ritmo se ralentizó y aquello cada vez tenía peor pinta y que hubo un momento en el que los acompañantes le tuvieron que dar apoyo para poder continuar y que empezaron todos a echar por la boca conjeturas acerca del porqué de aquellas debilidades y que no eran muy explícitos pero se dejaban decir que algunas mezclas de licores no hacían buena compañía en el alambique y que el que estaba malito de lo suyo no mejoraba y no veía la manera de tenerse en pie y que menos mal que la cabeza respondía a cualquier conversación y ocurrencia y que aquello se ralentizaba y en el camino se podía hacer eterno y que vista arriba vista abajo y paso adelante y pasito atrás aquello fue dando pie a que alguno pensara en la conveniencia de acercarse con el perjudicado al hospital y que algún otro  pensara que mejor dejarlo estar y que por fin dieron cuenta de la bajada y lograron llegar hasta Llano Alto donde hallaron un poyo en el que aposentar las posaderas los pies y el cuerpo y que el malito empezó a sentirse mejor en cuanto embauló un buen vaso de agua y que a pesar de todo decidieron cambiar de conductor por si aquello era solo una señal pasajera y volvían a las andadas y que ya bajando las cuestas del Castañar y con la vista de Béjar al frente la cabeza se fue asentando y que al llegar a la puerta de casa todos se prestaron a acompañar al de la cabeza y el cuerpo estropeados hasta el ascensor y que este se lo agradeció les deseó feliz año y se prometió a sí mismo dejar constancia de todo ello en una de sus páginas en las que dejaba correr las teclas a su antojo y comenzar una frase que no terminaba nunca y que por no tener no tenía ni predicado sino solo sujeto y que después de una comida frugal y una siesta bastante menos frugal se puso a ello y le salió este párrafo con el que se dio fin a la aventura de las comidas y las bebidas en la Peña de la Cruz un día de Nochevieja con la no menos accidentada del descenso por el camino de los Registros hasta Llano Alto y que de ella solo quedan los restos de la amistad y de los deseos de repetirla muchas veces aunque con un balanceo menor y un oscuro propósito de regular mejor lo que pide el cuerpo y lo que le sobra.  

jueves, 19 de diciembre de 2024

PARA UN AÑO NUEVO

 

PARA UN AÑO NUEVO

 

Perder el miedo al miedo es la consigna

para vivir la vida a cada instante;

saber que los solsticios y equinoccios

son puntos de partida en la conciencia

que crea los espacios y los tiempos;

exigir a los dioses un concilio

que elimine los males de la tierra:

si no cumplen el ruego, eliminarlos

y no soñarlos más en nuestros sueños;

sentir que todo está hecho a la medida

para que el ser humano lo violente

y en la consumación lo vivifique.

 

La luz será de nuevo ese misterio

que haga parar el tiempo y nos convenza

de que la vida es siempre un privilegio,

y el paso de los días nos permite

un gozo sempiterno si sabemos

abrir los corazones y gozarlo.

 

Un año nuevo atisba el horizonte:

una luz, un proyecto, la conciencia

de ser tan solo un eco diminuto

de la gloria que canta el universo.

 

FELICES FIESTAS Y FELIZ AÑO

 

Béjar, diciembre, 2024

 

Antonio Gutiérrez Turrión

viernes, 13 de diciembre de 2024

APROXIMACIONES

 

APROXIMACIONES

 

No rompas el silencio si no tienes

palabras adecuadas que lo encarnen:

hay silencios sonoros, bien lo sabes,

que guardan más tesoros y más bienes.

 

 

Todo en la vida es límite: las cosas

nos envían señales de que siempre

hemos de convivir con la evidencia

de que el mayor límite es la muerte.

 

 Son los mejores amigos

los que te han visto llorar:

lágrimas que se han vertido

compartiendo la amistad.

 

Los objetos registran mi memoria,

en ellos deposito mis recuerdos;

busco a veces sus huellas y me pierdo

cual náufrago sin rumbo entre las olas.

 

 

Detente en la carrera de la vida,

siente lo que sucede, abre tu mente,

actúa como la lógica te dicta.

Detente, siente, actúa: es suficiente.

 

Vivir no es convivir, es otra cosa

distinta y menos honda: es cohabitar

en líneas paralelas que se miran

sin terminarse nunca de encontrar.

 

La verdad no es verdadera;

es la duda la que empuja

a seguir en la carrera

que la vida nos dibuja.

 

No quiero morir de amor

ni quiero que mueras tú,

que amores que matan dejan

a la persona sin luz.

 

Tus manos van a las teclas,

las teclas van a tus manos;

en el medio del camino

se olvidan de ir al piano.

Es la música el reclamo.

 

Si me enseñas, yo te enseño,

y yo aprendo si tú aprendes;

que la vida es un encuentro

de dos diferentes seres.

 

Perderse en uno mismo es encontrarse,

hacer la eternidad en un instante,

rendirte en el misterio y allí hallarte

sin espacio y sin tiempo hasta olvidarte.

viernes, 6 de diciembre de 2024

EN LA MISMA ESTACIÓN

 EN LA MISMA ESTACIÓN

Hay realidades que siguen tozudas y que se resisten a cambiar, siquiera sea un poco, ninguna de sus aristas y de las variables que las componen. Para bien o para mal, que de todo hay. Una de ellas es la de la festividad de nuestra Constitución, cuya conmemoración se celebra hoy. Los medios de comunicación -siempre los medios- se encargan de recordarlo y algunos de los representantes públicos de casi estropearlo con sus declaraciones. Las ausencias son sonoras y atruenan el silencio y la oposición que muchos muestran a la llamada Carta Magna. El paso del tiempo acompaña a una forma de disolución en la indiferencia, tal vez por aquello de que la distancia sea el olvido.

Y, si seguimos gastando energías en los fundamentos, es fácil imaginarse lo que sucede con elementos de segundo y de tercer orden.

Yo mismo reviso lo que pensaba y escribía hace algunos años y me encuentro con que sigo en mis trece, sin que nada haya alterado mi concepción acerca de este asunto. De modo que voy a reproducir literalmente lo que escribí en esta ventana hace dos años. Era esto:

CONSTITUCIÓN

Como cada año, este país celebra el día 6 de diciembre el refrendo y la existencia de la Constitución, ese texto genérico que contiene las reglas esenciales que rigen nuestra convivencia. Una perogrullada. Vale. A dicha celebración acuden los representantes públicos, menos los nacionalistas e independentistas. Otra perogrullada. A partir de este hecho, consideraciones.

. Cada uno puede defender lo que le parezca bien, pero debería hacerlo con educación y con algún razonamiento. De la Constitución se sirven para defender en público sus opiniones y desde ella son defendidos. Actúese, pues, son elegancia y con respeto.

. Se dice con frecuencia que la mayoría de los españoles no votaron la Constitución, por edad, sobre todo. ¿Cuándo han votado las constituciones de casi todos los países sus habitantes actuales? En algunos casos no tienen ni constitución escrita y en otros la tienen desde hace centenares de años.

. Nuestra Constitución fue redactada y aprobada en condiciones de libertad. Algunos defienden que el contexto no era el mejor. Vale. Todas las constituciones han sido aprobadas en alguna circunstancia y están condicionadas por ese contexto. ¿No vale ninguna?

. ¿Quién prohíbe que se presenten alegaciones y propuestas de cambio de la misma? Incluso para su total derogación y la redacción de una nueva. El propio texto lo prevé y señala el método.

. Me parece que la actual Constitución es tan amplia en sus conceptos que cabe en ella casi todo.

. Las mayores pegas proceden de los partidos nacionalistas y separatistas, partidos que no todas las constituciones permiten que sean legales, pero la nuestra sí.

. Resulta curioso observar que esas voces proceden de territorios con niveles de vida más altos, a los que no sé qué cosas se les prohíben. Piénsese, por ejemplo, en el caso de Cataluña: situación geográfica con proximidad a Centroeuropa, con el Mediterráneo y África a sus pies, con un clima benigno, con la historia que arrastra, con la mano de obra de otras regiones españolas… Y algo parecido en el País Vasco.

. Sigo pensando que la realidad de España es la de un país fallido, después de cinco siglos, y que, en lugar de notar alguna fuerza común y algo de lealtad, lo que se produce a diario es un recelo continuo y una deslealtad constante. ¿Hacia dónde se puede apuntar en estas circunstancias? El desánimo se apodera de casi cualquier voluntad.

. ¡¡¡Y sin una definición clara del territorio, no hay serenidad para crear las leyes que regulen la vida de sus ciudadanos!!! ¡¡¡No hay posibilidad!!!

. A la derecha no le pido casi nada porque creo que no tienen ideas sino intereses. A la izquierda le reclamo que se defina con más claridad. Con el reclamo del asunto territorial, a los partidos extremos -sobre todo a los de extrema derecha- se les dan las campañas y los diputados gratis, sin necesidad de mover un dedo. Y el país sigue gastando casi todas sus energías en disputas de reclamaciones, en lugar de en sumas y aportaciones en beneficio de toda la comunidad.

. Creo que, en estos momentos, hay que fijarse más en las fuerzas que llenan de   agujeros la Constitución y la ponen en peligro sin acudir a los medios legales para modificar todo aquello que se quiera y deba hacerse.

. Por si fuera poco, también andamos enfrascados en conflictos legales por parte de aquellos que tienen que ser los garantes de que se cumpla la Carta Magna. Me refiero, claro, a los jueces del Supremo y del Constitucional.

En fin, que el enfermo mejore de la gripe. O de la pulmonía.


miércoles, 4 de diciembre de 2024

LOS SABIOS Y LA POLÍTICA

 LOS SABIOS Y LA POLÍTICA

Su diálogo Sobre el ocio lo concluye Séneca con estas palabras: «Si me dedico a recorrerlas (las políticas en las que puede intervenir el sabio) una por una, no encontraré ninguna que pueda soportar a un sabio o que un sabio pueda soportar». Los sabios de su época se encontraban sobre todo entre estas escuelas filosóficas: la estoica, la epicúrea y la contemplativa de la Academia.

Duras estas palabras, sin duda, las que separan de la actividad política clásica a los sabios, bien porque la política no los llamaba, o bien porque ellos no consideraban la política una actividad que se pudiera desarrollar con total nobleza.

Acaba de celebrarse un congreso del PSOE en Sevilla. En los mismos días, el PP ha contraprogramado una reunión de sus alcaldes en Valladolid.

La actividad del PP se descalifica por sí sola sin necesidad de argumentación. Si los réditos políticos se han de alcanzar con este tipo de triquiñuelas, ¿a quién le pueden extrañar las consideraciones de Séneca? ¡Qué poca nobleza! ¡Qué cabeza vacía de ideas! «El mundo en la oquedad de su cabeza». Y tengo la impresión de que -tal vez con menos descaro- otros partidos realizan actos parecidos cuando da la vuelta el aire. Como para no dedicarse al ocio, a un ocio que permita la contemplación y el análisis de uno mismo para practicar la virtud…

De los congresos de partidos suelen trascender solo aquellos momentos que seleccionan los medios de comunicación y que normalmente responden a presencias, ausencias, cambios de nombramientos, liderazgos y toda esta ralea de elementos intrascendentes. ¿Dónde los resúmenes de las ponencias? ¿Cuáles las principales resoluciones ideológicas? ¿Dónde se esconden las discusiones acerca de las proposiciones y las enmiendas? Y en este plan.

De esta manera, aquello que debería ser el meollo y la esencia de estas reuniones o no existe o duerme el sueño de los justos. Y sí que existe. Al menos en la teoría y en el papel. Otra cosa es comprobar si estas resoluciones son concretas o se pierden en vaguedades e imprecisiones. Y, sobre todo, si no se olvidan al día siguiente o los medios de comunicación los olvidan en el mismo momento en que se votan, pues ya se sabe que vende más la imagen del líder invicto o del líder caído. Y así nos va.

De Séneca hasta nosotros han pasado veinte siglos. Las circunstancias y los contextos han cambiado mucho. No sé si las ideas y los comportamientos han cambiado tanto. Ahora mismo, el ambiente de desánimo es bastante acusado. Yo sigo pensando que la participación pública es una de las más nobles. Pero también me pregunto con Séneca en qué tipo de política podemos participar, o cómo podemos participar en la política, es decir, en la cosa pública. Incluso los que no somos sabios. Porque maneras hay muchas, y no todas son orgánicas ni exigen carné en la mano.

domingo, 1 de diciembre de 2024

¡ERA VERDAD!

 ¡ERA VERDAD!

Yo sabía que era verdad, pero entiendo que a alguno le podía parecer una broma de mal gusto. Mo, no, era y es verdad. No me resisto a copiar la noticia tomada del periódico Cinco Días. Ya la comenté hace unos días. Hoy me reconforto con el argumento de autoridad.

«El inversor chino Justin Sun cumple la promesa y se come la banana que compró por 6,2 millones.

La obra de arte conceptual fue diseñada por el italiano Maurizio Cattelan

La banana en la edición de Art Basel Miami de 2019, cuando el artista italiano Maurizio Cattelan la pegó a una pared blanca con un pedazo de cinta adhesiva. RHONA WISE (EFE)

 




Juan Pablo Quintero

Madrid - 29 NOV 2024 CET

El coleccionista chino y fundador de la plataforma de criptomonedas Tron, Justin Sun, dice haber probado la mejor banana de su vida. “Está bastante buena, mejor que las otras”, aseguró. No podía decir otra cosa: la fruta le costó 6,2 millones de dólares (5,6 millones de euros). Es la que estuvo pegada a la pared con cinta adhesiva gris y que se considera una obra de arte conceptual. La pieza dividió al mundo de los críticos del arte en 2019 y es fruto del italiano Maurizio Cattelan, que la tituló Comedian.

Lo que sí puede decir la banana— si las bananas hablaran, claro —es que es la única que no se ha vendido en un supermercado. Sun, de 34 años, la compró en una subasta de Sotheby’s en Nueva York el pasado 21 de noviembre. Ese día, el cripto empresario dijo sentirse incrédulo de haberla ganado y tan solo 10 segundos después de proclamarse su dueño, prometió comérsela. “No se trata solo de una obra de arte; representa un fenómeno cultural que une los mundos del arte, los memes y la comunidad de criptomonedas. Creo que esta obra inspirará más reflexiones y debates en el futuro y pasará a formar parte de la historia”, dijo el día de la subasta. La promesa está cumplida: la ha pelado frente a periodistas e influencers, argumentando que el acto de comérsela formaba parte de la experiencia artística».

¿Cómo se puede ser tan gilipollas? Menos mal que por lo menos se la comió. Por cierto, no eran miles de euros como yo creía, sino millones. Repito por enésima vez que lo importante no es que haya por ahí algún imbécil mental suelto, sino que tenga legión de seguidores. Dios mío, llévame pronto.

jueves, 28 de noviembre de 2024

LA VELOCIDAD Y EL TOCINO

 

LA VELOCIDAD Y EL TOCINO

El mundo de la creación es tan frágil e impreciso, que ponerle normas resulta casi imposible. Desde los presupuestos de la razón, para más desconcierto, se suele dar por bueno dejar ese espacio al amparo del creador y de su inspiración; de esa manera, parece que lo nuevo y más digno de admiración han de aparecer con más fuerza. Con este par de premisas y en este contexto, todo termina por convertirse en un suelo resbaladizo, cuando no pantanoso y sin base sólida en la que reconocer el grado de bondad o de maldad de la obra creada.

Pero no ajustar algún tipo de límite trae como consecuencia que no sepamos definir ni concretar el valor de la obra creada y estemos al albur de otras variables que dependen de intereses espurios y no siempre confesables. Hasta tal punto, que se puede estar tentado a tomarse todo este mundillo con muchas reticencias, cuando no a descreer totalmente de él.

Mi criterio lima los extremos y concluye que es tan despreciable la innovación por la innovación como la conservación por la conservación. Ya sé que corro el peligro de la equidistancia, que tanto me molesta; pero no puedo confesar otra cosa. Reconozco que cada día me siento más cerca del grupo de los que rechazan buena parte de las creaciones modernas, sobre todo en pintura, que de aquellos que admiran cualquier elemento novedoso.

Hace un par de días contemplé una recreación en TV5 en la que se mostraba un cuadro formado por un plátano (supongo que de plástico, pues el natural se corrompería a los pocos días) pegado con papel de cello en un fondo de algún material escasamente sólido. Se había subastado y se había vendido por una suma enorme en miles de euros. Juro que no me invento nada. Y así otros ejemplos similares (caramelos en un cuenco, un guante arrugado…), todos adquiridos por miles de euros.

¿Qué simbolismo se puede vender con estos elementos? ¿Saben estos “novísimos creadores” qué es un símbolo? ¿Cómo se puede ser tan imbécil? ¿Cuánta gente se esconde tras estas pantomimas? ¿Por qué banalizar y destruir en ocurrencias sin ninguna altura mental el valor de la belleza?

Como sucede con tantos otros apartados en la vida actual, lo peor no es que existan tontos que se crean cualquier cosa; mucho peor es que existan legiones de seguidores de todas estas nimiedades y vulgaridades. Terminamos creando tendencias y modas, cambiando el canon e introduciendo en él variables que en nada adelantan el concepto y la creación de belleza. Y, para rematar, lo trasladamos a las modas, a la convivencia y a la sociedad.

Los plátanos están bien en las fruterías y en la cesta de la compra, para comernos uno de vez en cuando. Y los caramelos son buenos para chuparlos o para regalárselos a los niños. Pero, por dios, no insulten al sentido común y no sean tan vulgares y analfabetos. Que una cosa es el arte povero y otra la estupidez y el disparate.

jueves, 21 de noviembre de 2024

LO INVENCIBLE DE LA FRAGILIDAD

 LO INVENCIBLE DE LA FRAGILIDAD

Que el autoritarismo avanza y que la polarización social y política vive sus mejores días parece un hecho casi incontestable. Una comunidad inteligente no debería conformarse con describir un hecho, sino que debería siempre intentar analizar las posibles causas y sus probables consecuencias.

Iluso sería si quisiera arreglar el mundo en mis líneas tasadas. No tengo capacidad ni trato siquiera de intentarlo. Me conformo, como siempre, con abrir una ventana por la que entre el aire para poder respirar yo y quien quiera leer estas líneas. Pienso sobre todo en mis allegados y en mis descendientes, en mi círculo próximo.

Para que se produzca un estado de opinión que apunte a refugiarse en los extremos sociales y políticos, tiene que cumplirse, antes o al mismo tiempo, un contexto de desánimo y de descrédito de la realidad social en la que se viva. Y ello puede producirse por muy variados motivos, casi siempre unidos y no aislados.

En esta parte del mundo vivimos en eso que llamamos democracias liberales. Las democracias, por definición, son vulnerables e imperfectas; son un camino que se ha de andar cada día y que responde a la suma de muchas voluntades individuales con intereses muy diversos, tantos como componentes de esa comunidad. Por ese motivo, las democracias son siempre vulnerables y están expuestas a los vendavales de los populismos, de los autoritarismos y de las dictaduras de todo tipo. Porque los populismos y autoritarismos son exclusivos e inmediatos, en ellos las reacciones se producen de manera más automática, al ritmo de ordeno y mando y sin demasiados trámites formales. Someterse a un dictador desde una situación de miedo o de zozobra está en los genes de la condición humana, sea este dictador civil, religioso o económico. Lo que se ve es una posible salvación inmediata, olvidándose del futuro. El caldo de cultivo es siempre el miedo y la situación de incertidumbre.

Sin embargo, por muchos nubarrones negros que aparezcan en el horizonte, las democracias occidentales resisten cualquier comparación con los sistemas sociales y políticos de otros lugares. De hecho, cualquier otro régimen o trata de imitar o se esconde bajo las apariencias de nuestras democracias occidentales. Y hay ejemplos de todo tipo que las consagran como tales y las apoyan. Véase, si no, lo ocurrido con la última pandemia, las aspiraciones de tantos países a ingresar en el club de la llamada Unión Europea o el reguero de inmigrantes que se juegan la vida en busca de nuestros países.

Es en ese reconocimiento de fragilidad precisamente en el que se encuentra su fortaleza. Pensar en lo que se puede perder resulta un muy eficaz escudo para su defensa. Hay ejemplos de otro tipo en los que se diría que se presume de fortaleza, pero que se apuntan al bando perdedor en cuanto se comparan con las democracias y que, en todo caso, siempre andan en el disimulo y en la apariencia de algo que se parezca a las democracias: China es un buen ejemplo.

Así que deberíamos acostumbrarnos a caminar sobre el alambre, sin sacar pecho, sabiendo que nada es definitivo y que todo es provisional, que el éxito está en el avance, aunque este sea pequeño y paso a paso, que la meta debe estar en nuestra mente y en nuestra ideología como forma de ver y de ordenar el mundo, pero con el ejercicio diario de lo relativo y de lo impreciso.

Aunque parezca un oxímoron, cuanta más fragilidad, más precaución y más empeño en la superación y el mejoramiento diario de la convivencia.

Mucho que aprender y que practicar. Desde ese relativismo receloso que crean la experiencia, el conocimiento, el sentido común y la buena voluntad.


jueves, 14 de noviembre de 2024

AFORISMOS

 


AFORISMOS


Perseguir el placer continuamente,

descubrir que la vida es como un curso,

aprender el oficio de vivir.


Constatar que la vida es el camino,

andar sin conseguir la meta nunca,

pues quien la haya alcanzado ya está muerto.


Ya se ha dicho que el tiempo no está fuera:

se encuentra en las palabras que concretan

 las notas que les dicta la conciencia.


El arte que se basa en la palabra

compite cuerpo a cuerpo con la vida,

pero en ese combate siempre acaba

condenado a la pena del fracaso.


Examen de conciencia cotidiano:

¿Quién vive aquí a mi lado?

¿Quién habita las sombras de mis días?


Se dedicó al olvido y a ser nadie,

una forma especial de libertad.


Pesaba su existencia investigando

cuánta carga de tiempo y de conciencia

consigue soportar el ser humano.

Construyó un mapa gris, confeccionado

con una geografía variable.


Soy un ser de tormentas interiores

y de calmas y soles exteriores.

No puedo conocer ni me conocen

con tantas variables en el clima.


Un escritor de culto es respetado

por las severas garras de la crítica,

pero corre un peligro: la carencia

y el olvido cruel de los lectores. 


Resumen descriptivo de un objeto:

Su valor es su precio en el mercado


Desnúdate de todas las noticias

y déjate el pasado en el olvido:

las nostalgias se borran en la arena

escuchando el murmullo de las olas.


Alguna vez fui un niño al que recuerdo

con el futuro al frente. Hoy reconozco

que no lo encuentro más que en mi memoria.

viernes, 8 de noviembre de 2024

MADRID DF

 

MADRID DF

España: el pacto y la furia. Este es el título de un largo ensayo (más de 600 páginas) escrito por el periodista catalán Enric Juliana. Lo he leído con mucha atención y curiosidad.

Por encima de todo, he de confesar que el autor me parece un periodista de largo alcance, de fondo amplio y que domina la forma de manera sobresaliente. No sé si hay muchos como él en España. Tan solo me sobra un poco de énfasis y de sobreseguridad en el fondo que manifiesta y en su forma de expresión.

En este largo ensayo recoge sus opiniones acerca de lo sucedido en España desde los atentados del 11M (2004) hasta principios de 2024. Todo lo que va de siglo veintiuno.

Su análisis me parece sesudo y de muy largo alcance y contenido. La lectura del mismo se me antoja muy provechosa. Pero mi visión se vuelve a encontrar con el principio de los principios, con la base que condiciona todo para bien y para mal. Me refiero, claro, al asunto territorial. Otra vez el asunto territorial.

Como el más radical de los nacionalistas, el hilo conductor de casi todas sus páginas es el del enfrentamiento entre Madrid y Barcelona, entre lo que significa y simboliza Madrid y lo que quiere representar Barcelona, y, por extensión, Cataluña. Juliana utiliza en numerosas ocasiones la expresión que da título a estas líneas. Creo que es un gran acierto, porque es el epicentro de muchas cosas e irradia en todas las direcciones. Como lo hace, por ejemplo, Méjico DF.

Negar que la situación geográfica central de Madrid en la Península Ibérica condiciona y favorece su desarrollo frente a los demás territorios creo que tiene poca base y oculta lo evidente. Dejar ver que solucionar la rivalidad entre Barcelona y Madrid es el arreglo de todos los territorios y de todas las personas me parece mucho más burdo y egoísta.

La situación geográfica de Madrid favorece un desarrollo de todo tipo de carácter radial, y eso hace asomar el peligro de dejar un poco de lado otras regiones. Por eso, defender desarrollos transversales entre otros territorios debería estar en la mente de los que tienen que decidir inversiones y decidir lugares para organismos. Pero ya me gustaría a mí ver que un catalán defiende la creación de un organismo nacional en Badajoz, por ejemplo. Nunca lo han hecho, ni lo van a hacer: el egoísmo se lo impide. En tal situación, ¿quién se va a llevar el gato al agua? Pues quien tenga más poder, en población, en riqueza o en influencia social.

Y ahí, Madrid tiene todas las de ganar. Porque, para bien o para mal, Madrid es rompeolas de todas las Españas. Quiero decir que la geografía y la inercia empujan a concentrar fuerzas en el centro, por proximidad y porque Madrid no resulta excluyente para nadie.

Deducir de ahí que Madrid es más rica porque está mejor gobernada es también un ejercicio de toral egoísmo, de ignorancia o de ambas cosas juntas.

¿Por dónde la solución? Yo no poseo varitas mágicas. Desde luego, no por los enfrentamientos que buscan victorias en luchas entre dos, sino en la unión de ilusiones, de metas y de esfuerzos comunes, del centro y de la periferia, pasando por todas las regiones más despobladas, que son muchas y también forman parte de la comunidad. ¿Para cuándo un país con unas poquitas metas comunes en las que todos nos embarquemos y en las que todos pongamos nuestros esfuerzos ilusionados? ¿En qué resta esta posición algo a las libertades y a las expresiones propias de cada comunidad? ¿En qué? Las posiciones centrípetas producen malos humores en mucha gente. No menos que las centrífugas, si no se razonan. ¿Por qué no políticas y miradas globales, comunes y generales que nos ilusionen un poco a todos? ¿Por qué no sentirse orgulloso de una comunidad amplia y no andar como el perro y el gato gastando energías en enfrenamientos a dos, o a tres, o a treintaitrés?

Mientras no entendamos que somos, además de hijos de la familia en la que nacimos, a la vez ciudadanos del mundo, esto tal vez será solo una ilusión y una utopía.

Pero a mi me gustaría que la utopía tuviera más partidarios que la realidad.

martes, 5 de noviembre de 2024

INDICIOS

 

INDICIOS

. La muerte de un ser querido produce la eternidad del sufrimiento.

. La muerte de un escritor es siempre pública: muere en sus obras.

. La realidad es siempre social y perecedera: cambia con el tiempo.

. Cada momento del presente contiene todo lo que he sido.

. Juventud: época en la que el cuerpo no sabe quejarse.

. Vejez: exaltación continua de la pasada juventud.

. Morimos en la ignorancia, sin saber lo que hemos sido ni lo que vamos a ser.

. Visión optimista: Si seguimos viviendo, lo hacemos porque somos resultado de sucesivos éxitos. Evolución de las especies.

. Los egoístas mueren antes porque no tienen nadie para quien vivir, salvo ellos mismos.

. Vivir muchos años me permite asistir a la caída de muchas ideologías.

. Un deseo: Que la utopía tenga más adeptos que la realidad.

. Envejecer: ver venir el jaque mate en la partida de la vida.

. La embriaguez de la locura me hace vivir y me libra de la muerte cotidiana.

. Tengo sed de vida: son los muertos que chillan en mi sangre y me empujan al llanto y a la risa, a sentir que soy carne que circula en el mundo del tiempo y del espacio.

martes, 29 de octubre de 2024

CONTRA ESTO Y CONTRA AQUELLO

 

CONTRA ESTO Y CONTRA AQUELLO

       (Sé que robo las palabras del título a Unamuno, pero las palabras son de todos y existen para ser usadas). 

Hace tan solo unos días que se ha producido la dimisión de Íñigo Errejón, político destacado de la formación SUMAR. Lo ha hecho tras la denuncia, por acoso sexual, de alguna persona. En este país parece que ha estallado la tercera guerra mundial. Me apetece -como siempre en forma casi de guion- dejar apuntadas algunas consideraciones.

1.- La conducta de este político, acerca del cual yo también poseía una buena consideración, es de todo punto reprobable y merece una censura clara. Esto creo que no lo duda nadie, yo tampoco.

2.- Será bueno que actúe la prudencia y que se siga el proceso de acusación, prueba, juicio y sentencia; por más que el reconocimiento y las noticias que se van conociendo no apuntan en muy buen sentido para el acusado.

3.- En general, en la vida, creo que es bueno tender a ser comprensivos y estar dispuestos a perdonar un error, si se pide perdón; cuando se trata de una tendencia, como parece, entonces la disculpa a mí se me hace mucho más difícil, aunque los hechos repetidos sean leves.

4.- Una persona tiene que tender a ser coherente y actuar según sus pensamientos. Incluso se puede pedir algo más a aquellos que han destacado por posturas muy claras acerca de un asunto cualquiera. Él ha sido un representante público y muy destacado de ideas que se contradicen con su actuación.

5.- Tengo la impresión de que, siempre que se trata de asuntos de tipo sexual, nos ponemos estupendos, en un país y en una cultura que tanto ha rondado por el perfil de esta moral. Cinismo se llama eso y bien estaría analizarlo.

6.- Los medios de comunicación se han lanzado en masa a crear patíbulos en los que colgar al reo para el escarnio público. Y ay de aquel que falte a la cita: se le pondrá falta en la lista de inquisidores. Son los mismos medios que, día sí y día también, se lucran con imágenes, espectáculos y manifestaciones que en mucho conducen a crear contextos en los que actúa mucho más el instinto que la razón, y el sexo que otras conductas reflexivas. Esto es cinismo elevado a la enésima potencia.

7.- Esta sociedad hipócrita suele confundir un hecho particular con el valor o la falta de valor de una ideología. Así, a partir de esta conducta, reprobable sin duda, pero particular, profetizan el fin del mundo en la formación de la que el acusado formaba parte y era portavoz. Estos hechos no ayudan en nada a la formación política, pero las ideas que esta defiende siguen siendo buenas o malas con independencia de la conducta de uno de sus miembros. Otro acto de cinismo, con mezcla de ignorancia y de mala baba.

8.- Aún daré otra vuelta más de tuerca: A pesar de los pesares, que una persona no sea limpia en su conducta no significa que lo que defienda para la sociedad sea malo, aunque sí muestra un grado de incoherencia notable que lo deja en mala situación en la estima social.

9.- Cuidado con las coherencias, que son importantes, pero siempre relativas, como relativas y no absolutas son las personas. Reconducir conductas después de pedir perdón debería estar en la lógica de la convivencia social.

10.- Si aplicamos analogía -y ya me contarán cómo se puede uno conducir en la vida sin ella- de exigir una conducta paralela a las ideas que se defienden, habrá que tener cuidado y ver si no estamos defendiendo también que aquel que defienda lo contrario esté justificado para actuar en sentido contrario. Si uno defiende que su conducta es la de robar bancos, ¿está justificado que los robe? Cuidado con las exigencias de máximos, que nos pueden llevar a todos a la cárcel o al caos absoluto.

11.- ¿Qué elementos (medios, colectivos sociales, escalas de valores…) son los que propician la creación de “héroes” de todo tipo para usarlos y tirarlos según convenga a cada momento? ¿No sería bueno darle una vuelta a esto? ¿No propician estos contextos lo que sucede más tarde?

12.- Quiero decir, para no alargarme, que los hechos son rechazables de todo punto, que las víctimas son las perjudicadas y deben ser atendidas, que los medios de comunicación son aves carroñeras que se echan sobre la presa muerta a la vez que crean contextos a diario en los que se alimentan conductas como las que luego condenan y masacran, que las ideas son buenas o malas con independencia de que el que las defienda cometa errores o no, que pedir perdón es un hecho positivo que debe favorecer a todos, que las formaciones políticas no actúan todas de la misma forma cuando se conocen hechos de este tipo o de otro, que la formación política a la que pertenecía Errejón sufrirá el rechazo de la sociedad impulsada por los medios de comunicación, que su decadencia se debe y se deberá, según mi opinión, no a estos hechos -detestables, que hay que decirlo mil veces- sino a la falta de estructura territorial y al batiburrillo de formaciones que la componen

13.- Me gustaría que las víctimas se sintieran reconfortadas y que no cayéramos todos en la confusión en la que nos envuelven los cínicos medios de comunicación de masas, que quitan y ponen, que deciden lo que es bueno y malo, y que nos guían por los caminos que les interesa.

 

Y ahora, vengan palos, que la espalda ya está puesta y es más fácil seguir la corriente social y estar al sol que más calienta. Pero uno ya está curtido y tiene la piel dura. Venga.

jueves, 24 de octubre de 2024

CONTEMPLACIÓN

 CONTEMPLACIÓN

 

Mirador del Buen Duque, padre Roca,

mañana clara, octubre, veintidós.

Dios también está azul esta mañana.

En la ladera norte de la sierra,

los colores reclaman su presencia,

el verde se degrada en amarillo

y los ocres señalan que el otoño

ha instalado su hogar entre nosotros.

Este otoño es despojo de materia,

de aquello que se muestra innecesario,

es eco de los ecos que perviven

y van hasta humillarse y apagarse.

Como a vivir invita al que contempla

lo que le ofrenda la naturaleza.

 

Ungido por la luz, que de los cielos

baja a tomar contacto con el suelo,

mis sentidos se esponjan del misterio

de la naturaleza, de ese don

que ofrece la materia en su camino

de nacer y morir continuamente,

sin causas que lo expliquen ni lo empujen.

 

Así mi vida toda, en la que paso

también mis estaciones;

mas, ay, con permisos limitados

en la carrera inútil

del espacio y del tiempo

jueves, 17 de octubre de 2024

AGENDA PARA UN NUEVO DÍA

 AGENDA PARA UN NUEVO DÍA


De repente, comprendo que el otoño

se ha adueñado del cielo y del paisaje.

Me cuesta despegarme de las sábanas,

donde he tejido sueños que me siguen

rondando en la cabeza. Debo alzarme

a contemplar la vida en la terraza.


Hay niebla a ras de suelo, sopla un viento

que susurra los ecos de otros días

y acompaña a una lluvia de tristeza

que transporta mensajes imprecisos

que no me dicen nada. Me preparo

a cumplir con mi agenda cotidiana,

tan larga de deseos y tan corta

de logros y de gratas realidades.


Envolveré mis actos en ternura,

olvidaré razones y pretextos

que siempre comprometen mis acciones

y estaré para todo lo que venga

de parte de la vida. Y a la hora

de volver a las sábanas, la noche

será abrigo y examen de ternura

para dormir en calma las noches de este otoño

que alfombra ya el paisaje y me convida

a esperar dulcemente la luz de otra mañana.

jueves, 10 de octubre de 2024

LA FE, LA CONCIENCIA Y EL LAGO

 

LA FE, LA CONCIENCIA Y EL LAGO

Una circunstancia deportiva y familiar me ha llevado este fin de semana hasta Sanabria, esa comarca del noroeste de Zamora que ya apunta claramente hacia Galicia, donde la naturaleza es ya toda verde y los llanos ya son chanos, o sea, de base lingüística gallega. Hasta allí he acudido en varias ocasiones y por distintos motivos.

Cada vez que me desplazo hasta Sanabria (Puebla, El Puente, Galende, Ribadelago, San Martín de Castañeda…) incluyo entre mis enseres el librito San Manuel Bueno, mártir, de Unamuno. Y, en cuanto encuentro un rato, me lo despacho con fruición. Me gusta su lectura precisamente en los lugares físicos en los que se inspira la novela. Allí, a la orilla de las aguas esmaltadas, espejo de los cielos y tumba de la soñada Valverde de Lucerna, a los pies del monasterio de San Martín de Castañeda, mirador casi altivo del lago y de todo el horizonte.

Este libro despierta en mí casi mil sensaciones, tal vez una por cada párrafo y varias por cada página. La principal, claro, es la de la ocultación de la falta de fe con tal de no despertar en los demás la conciencia de la racionalidad y de sus posibles (casi seguras) inquietudes y desilusiones. Este cura de pueblo que era capaz de todo, de engañarse y de engañar a los demás, con tal de no romper una esfera mágica de inocencia entre los habitantes de Valverde de Lucerna y que consiguió algo parecido incluso con Lázaro, el único que en el pueblo poseía la capacidad para dar sentido y cabida a la razón.

El libro está cargado de simbolismos y de incitaciones a la disputa y al intercambio de opiniones. El primero y principal sigue siendo precisamente esa de someter el valor y el desarrollo de la razón a una fe tradicional, sin ninguna grieta, esa fe del carbonero que no necesita preguntarse por nada, y que todo lo somete a la costumbre, a lo que le llega del representante de esa fe, y que con ese dejarse llevar se siente alegre y como si nada le alumbrara nada diferente.

 ¿Es eso cobardía?, ¿es ignorancia?, ¿es producto de alguna desilusión?, ¿existe algún nivel de conciencia en este comportamiento? Y, desde la situación del cura de la aldea, ¿es egoísmo?, ¿es temor?, ¿es sublimación?, ¿de qué?, ¿es cobardía personal?, ¿el cura es en realidad bueno y mártir?, ¿cómo se puede mantener una actividad y una actitud vital de fe durante mucho tiempo con una base de incredulidad?, ¿se puede progresar así, con esa ceguera racional y solo en el mundo nebuloso de la fe?, ¿a quién beneficia esto, a todos o solo a algunos? Y muchas más preguntas que yo no sé contestar con certeza.

Porque, por encima de cualquier teoría, Unamuno ensalza y defiende el valor de la vida, de la vida en positivo, de la vida que desarrolla las ilusiones y los sentimientos. Y esta vida se halla sobre todo en las gentes sencillas, esas que tienen en común solo algunas cosas que han llegado a crear posos quién sabe cómo, pero que las mantiene en esa identidad común, lejos de las teorías y de las agitaciones sociales, académicas o económicas. “-Lo primero, decía (el cura), es que el pueblo esté contento, que estén todos contentos de vivir. El contentamiento de vivir es lo primero de todo”. Y en boca de Ángela Carballino: “Y más tarde, recordando aquel solemne rato (el de la muerte de san Manuel) he comprendido que la alegría imperturbable de don Manuel era la forma temporal y terrena de una infinita y eterna tristeza que con heroica santidad recataba a los ojos y a los oídos de los demás”. O en sus conversaciones con Lázaro: “¿La verdad? La verdad, Lázaro, es acaso algo terrible, algo intolerable, algo mortal; la gente sencilla no podría vivir con ella”. (…) “-Y el pueblo, dije, ¿cree de veras? -¿Qué sé yo…! Cree sin querer, por hábito, por tradición. Y lo que hace falta es no despertarle. Y que viva en su pobreza de sentimientos, para que no adquiera torturas de lujo. ¡Bienaventurados los pobres de espíritu!”.

Qué añadir como comentario si se me ocurren mil en contra y otros mil a favor. Así me sucede tantas veces con este don Miguel de Unamuno a quien tanto admiro y con quien tanto discuto cada vez que me asomo a cualquiera de sus textos.

¿Y la metáfora de la nieve cayendo mansamente en el lago hasta fundirse con el agua, como la fe se funde con la vida sencilla y humilde de tantas gentes? ¿Y la frase trágica “¡Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado!?”, que encierra todo un tratado de doctrina filosófica y de teología? ¿Y el cura, hombre de acción, sin concederse ni un respiro para la reflexión, tal vez por aquello de que “La verdad es acaso algo terrible”? Ya digo, todo un cúmulo de indicios y de símbolos en tan pocas páginas. El libro se lee en un rato, pero deja huella para mucho tiempo. Para trasladar sus sugerencias al contexto de nuestros días, que siguen manteniendo un ritmo, ahora frenético, que apenas deja espacio para la reflexión y que inyecta en las masas símbolos y mitos de otro tipo que igualmente alucinan y conducen como rebaños a tantos ciudadanos.

Sigo sin saber si don Manuel es un santo o un cobarde, un héroe o un villano, un idealista o un desencantado… Esas mismas preguntas debo formulármelas a mí mismo, por si me sirven como ejemplo para mis actividades diarias y para mi conciencia de ciudadano. Cada cual sabrá lo que tiene que hacer con su vida y con su conciencia.

viernes, 4 de octubre de 2024

HOY DIOS ERA...

 

HOY DIOS ERA…  

  

Hoy Dios era la menta en El Regajo

y era gris en el cielo, entre las nubes.

Los ocres y amarillos dibujaban

ese Dios otoñal, descolorido,

que entristece los verdes en las ramas.

Hoy Dios era la fuente donde un lobo

era agua entre sus fauces y el sendero

apuntaba en zigzag hacia el regato

que deja los rumores mortecinos

de un son de agua y viento a ras de suelo.

Hoy Dios era un discurso de la naturaleza

y era un feliz festejo en los sentidos.

Hoy Dios era el otoño recitando

las notas de una hermosa melodía

 

Y yo era Dios también en ese coro

que ensaya sus canciones cada día

y a veces desafina y da la nota,

pero siempre regresa a dar lecciones

de sapiencia y real sabiduría.    

 

 

jueves, 19 de septiembre de 2024

VOLVERÉ

 VOLVERÉ


Sé que algún día incierto volveré.

Volveré como viento o como niebla,

que vuela o que se adensa

por encima de todos los tejados;

bajaré a ras de tierra y, en las noches,

vigilaré los sueños que se sueñan

dentro de las paredes. Como un pájaro,

volaré entre los pinos y castaños

y cantaré canciones de otros tiempos.


Volveré en el secreto del silencio,

para no molestar a las conciencias

que ya no me conocen,

ni a los lugares íntimos

donde jugué a la vida y a la muerte.


Las gentes seguirán en sus quehaceres,

contemplarán la noche y las estrellas

como un efecto más del universo,

cerrarán las ventanas y, en silencio,

dibujarán las señas de sus sueños.


Yo seguiré buscando por el aire

unas manos dispuestas al abrazo

y al recuerdo fraterno que rescate

mi nombre de la noche del silencio.


jueves, 12 de septiembre de 2024

ÁNGEL CALVO

 ÁNGEL CALVO

También el tiempo ara y va tejiendo campos en los que crecen cosechas que suplantan a otras que se han quedado viejas u olvidadas. Porque el tiempo pasa, que es lo que siempre pasa y va dejando huellas que se pierden en los brazos oscuros del olvido.

Hoy el tiempo ha dejado de ser tiempo en la conciencia de Ángel Calvo Meirama, militante socialista y alcalde de Béjar a finales del siglo pasado. Esta nota de recuerdo no es solo para el militante, sino para la persona que sustentaba a ese militante.

Yo había ingresado en el PSOE de Béjar, más como muestra testimonial que otra cosa, en una ciudad estrecha en la que las gentes de derecha se significaban públicamente como lo hacen en poblaciones pequeñas; y, además, como consecuencia lógica de mis pensamientos, de mis lecturas y de mi manera de ver la vida. Había que expresar públicamente en qué orilla andaba cada uno. Pero esto aquí no importa. Fue Ángel Calvo quien me llamó para echar una mano en el ayuntamiento y allá que fui en la lista de candidatos. Se perdieron las elecciones y a los pocos meses decidió dimitir de su cargo de concejal, pensando seguramente que su tiempo había pasado. Después siguió con sus clases en la EUITI hasta su jubilación. Los últimos años fueron de decadencia penosa en la salud, hasta su fallecimiento en el día de ayer.

Más allá de hacer una necrológica laudatoria, tan solo quiero poner de relieve una virtud que creí ver en Ángel Calvo y que creo que no adorna a demasiadas personas que actúan en la vida pública. La militancia suele llevar aparejada cierta predisposición a hacer caso a cualquier indicación que proceda “de arriba”; como si la organización estuviera por encima de todo. No hay más que alzar la vista para comprobar que tal inclinación no solo no ha desaparecido, sino que cada vez parece que se inclina más por la pendiente. Es asunto largo de contar y abarca muchas variables.

Ángel Calvo, sin embargo, hasta donde yo lo conocí, era una persona de principios, y sus opiniones y convicciones así lo demostraban. Lo diré de otra manera: en él creí ver asentada una ideología determinada que guiaba su actuación por encima de cualquier partido u organización. Estas posiciones suelen llevar acarreados momentos difíciles y exclusiones y olvidos en la estructura. Cuando la ideología está bien asentada, esto se soporta mejor y hasta se puede tomar a chanza. Un repaso a su “carrera” nos ilustraría muy bien en este aspecto.

En el día a día, apunto tan solo una consideración: la dificultad de confrontar argumentos en el ayuntamiento. Qué difícil es disputar con quien carece de formación, de ideas y anda solo interesado en fastidiar al rival con ocurrencias que no vienen a cuento y hasta con acusaciones de vida personal. Y esto un día y otro día, y otro. No me extraña que, al final, desaminado e impotente, decidiera tirar la toalla y marcharse. La ciudad estrecha sabrá por qué seguía sustentando esta situación con sus votos.

Después, ya lo he dicho, el tiempo pasa, que es lo que siempre pasa; y todo se ha ido diluyendo lejos de los focos y en la niebla y el fin de la memoria.

El tiempo de cada uno es el que haya creado su propia conciencia y el que mantengan la de los demás. La de Ángel Calvo se marchó hace tiempo de sí mismo. Hoy volvemos a hacer tiempo con su recuerdo y ensanchamos un poco su presencia en el tiempo. D.E.P.


domingo, 8 de septiembre de 2024

ROMERÍA DEL CASTAÑAR

 ROMERÍA DEL CASTAÑAR

 

Domingo, ocho de setiembre,

el sol despuntado había

y las gentes bejaranas

saludan un nuevo día.

Es día de fiesta, de gozo,

de honrar a Santa María.

Por eso, a media mañana,

hacia el Castañar subían

llenando rodeos y aceras

con palabras de alegría.

 

En torno del santuario

que en el monte se erigía,

se congregan multitudes

para celebrar la misa

en la Plaza de los Tilos

con toda la clerecía,

los fieles y los cofrades

que forman su cofradía.

Las gentes menos devotas

por el Castañar caminan

repartiendo parabienes,

saludos y cortesías;

unos llenan las aceras,

otros andan a porfía,

por encontrar un buen sitio

desde el que recrear la vista.

Por allí amanecen rostros

de personas conocidas

que solo una vez al año

en el monte aparecían;

por el otro lado caras

de gentes desconocidas

que se mezclan y se funden

en jovial algarabía.

 

La misa ya terminada,

la procesión se veía

con la imagen de una virgen

subida en una hornacina,

seguida de muchos fieles

que cantan, rezan y gritan,

con voz que recibe el viento,

vivas a Santa María.

Los devotos, cuando pasa

la imagen, callan y miran,

tal vez soñando milagros

para el resto de sus días.

Allí las autoridades,

alcalde, concejalías,

guardia civil, comarcanos,

peñas, gentes, policías,

como guardando a la imagen

de ofensas y de mancillas.

Desde el Mirador, la Virgen,

bendice a gentes e industrias,

todo lo que a ver se alcanza

de Béjar y cercanías.

 

De vuelta la procesión,

ya camino de la ermita,

se repiten los aplausos,

los cánticos y los vivas

mientras departe la gente

entre cañas y sangrías.

Los bares, los chiringuitos

que en El Castañar había

no dan abasto sirviendo

lo que la gente pedía.

 

Así se llega la hora

de degustar la comida

en restaurante o al fresco

que les regala la umbría.

 

Para esa hora muchos fieles,

con la costumbre cumplida,

han vuelto a coger la senda

que a la ciudad conducía

desgranando comentarios

que hablan de la romería.

Muchos otros aprovechan

para ir a la corrida

de toros que en La Ancianita

se celebra en este día,

-afirman que con la imagen

de la Virgen presidida:

hasta este punto se mezclan

devoción y fantasía-.

 

Solo queda la verbena,

con la noche ya crecida,

para cerrar esta fiesta

y cantar su despedida.

Mañana, de nuevo es hora

del deber y la rutina.

 

¿Qué buscarán estas gentes

monte abajo y monte arriba,

tras una imagen que calla

y parece que medita

viendo a tanta gente junta

y a sus favores rendida?

 

El juglar también contempla

todo lo que allí veía

y no sabe darle a esto

respuesta definitiva.

¿Devoción, costumbre, fiesta,

superstición, fantasía,

miedo, consuelo, carencia

de seguridad de vida?

 

A meditar sobre ello

este juglar os invita.