lunes, 19 de junio de 2023

NO TE ENCUMBRES...

 NO TE ENCUMBRES…

Ahora que se acaban de poner en marcha los ayuntamientos y que los gobiernos de las regiones y autonomías apuran los últimos acuerdos es el momento de llevar a la práctica las ideas, las intenciones y las cualidades de cada uno de los representantes, sobre todo de aquellos que van a ejercer el poder en los puestos de mando.

Habrá que suponer que se mantendrán vivos los principios fundamentales que debieron exhibir en las campañas. ¿Existieron esos principios? ¿Se plasmaron en programas? Porque ahora toca pasar de las musas al teatro, y habrá que ver si no viene un mal viento y arrasa con todo.

En su inmortal obra Antígona, escribe Sófocles: «Es imposible conocer los sentimientos, el alma y las intenciones de un hombre (entiéndase persona) hasta que ostente un cargo».

Alguien me ha mandado un pequeño vídeo de un alcalde elegido (creo que hay que tener compasión y no ser más explícito). Hablaba en su intervención de toma de mando. No tiene desperdicio. «Que lo que es la casualidad de la vida. Desde el día que nací, ellos (sus padres) sabían que yo iba a ser alcalde». Así, adivino y con dos cojones. Sin pudor y con unas dotes milagreras que para sí las quisieran los ángeles, los arcángeles y hasta los serafines.

La fórmula más cómoda de apartarse de estos niveles del inframundo es recogerse en los cuarteles de invierno y cerrar el círculo en el entorno de uno mismo. Pero me parece una postura egoísta. Al menos habrá que dar algún grito de desahogo. Aunque después aparezcan el desánimo y el desencanto.

En la segunda parte de El Quijote, Maese Pedro le dice a su ayudante: «No te encumbres, muchacho, que toda afectación es mala». Es una fórmula eufemística que encubre verdades desoladoras.

Pues eso.

No hay comentarios: