REZO DE VÍSPERAS
¿Nunca será ya el día de la
ira
o de la paz completa y
verdadera?
Que se levante en su candor el
niño
y explote con su risa las
conciencias,
que las mañanas rompan con las
sombras
y olviden que la noche
será otra vez testigo de la
nada,
que paralice el cielo las
promesas
de otro lugar feliz más
transparente,
que los dioses no tengan
descendencia
en sátrapas bastardos que
predican
el miedo y el temor como
rescate,
que vuelen las gaviotas por el
cielo
y nunca a ras de tierra y al
acecho
de todos los deshechos que
ofrece la carroña,
que sea una pesadilla y un mal
sueño
el marcador que anuncia
las subidas del IBEX 35,
que truenen las esquinas y la
lluvia
destruya las paredes y
tejados,
y que el mundo renazca en un
big bang
mirándose desnudo y satisfecho
ante tanto despojo renovado
en otro pacto nuevo y
luminoso.
Tal vez después, con el
ejemplo
del día del temblor y de la
ira,
se afanen los plurales y las
rosas
se carguen de perfumes. La
palabra
acaso re pronuncie con
ternura,
y el odio, si ha de serlo, sea
más puro.
Puede que el mundo entonces
sea habitable
y la vida merezca
la pena y el orgullo de
vivirla.
1 comentario:
Eso...dediquémonos a afanar plurales.
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