HISPANIDAD
¿Qué significa hoy la palabra
hispanidad? ¿Qué elementos encierra? ¿Cuáles son sus connotaciones? Aunque solo
sea por analogía, parece sencillo entender que hay dos componentes que se
juntan para darnos este recuelo que se mueve en el alambre y tiene que hacer
equilibrios para mantenerse en pie. El primer componente tiene que ver con
España, y el segundo añade esa señal de abstracción que aporta el sufijo –idad.
Tal como en comod-idad, real-idad, arbitrari-edad, neces-idad…
Me parece que zozobramos en la
primera parte y no somos capaces de llegar a la orilla para, allí, hacer un
esfuerzo de abstracción y arañar en ella lo que sea esencial y común a todos.
¿Alguien sabe qué es España?
Quiero decir en su descripción geográfica, en su recorrido histórico y en su
situación actual. Que se lo pregunten a todos los independentistas (o a los del
otro extremo), e incluso a los dirigentes de cada región cuando solo miran por
sus dominios y jibarizan el mapa a su antojo y egoísmo. Que hagan lo mismo con
el mundo latinoamericano para entender cuál ha sido el sello que en aquellos
territorios ha dejado España en tantos siglos. Que hagan una encuesta con los
representantes presentes, y, sobre todo, ausentes en la celebración del día de
la Hispanidad.
¿Cómo vamos a pasar a la
abstracción (a las ideas comunes que pueda encerrar este concepto) si no
concretamos ni la geografía ni la historia ni la realidad social y política
actual? Es como si quisiéramos hacer abstracción acerca de la modernidad si no
tenemos claro que es eso de lo “moderno”. Causa tremenda pena observar que el
desconcierto general de la primera parte no nos permite pasar a la segunda,
para explotar en beneficio común aquello en lo que tendríamos que estar de
acuerdo para empezar a actuar. Y todo este desbarajuste se produce en la nación
más vieja de Europa, teóricamente. Qué maldición, qué peste, qué pandemia, qué
mal de ojo, qué panorama tan oscuro, qué…
Me conformo -una vez más- con
advertir de que, sin solucionar el primer escalón, el de la identidad
territorial e histórica, lo demás no tiene cabida posible, porque todo serán
banderías, mala leche, egoísmos y deslealtades. Caín y Abel otra vez a la
carga. Mierda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario