LENGUAJE NATURAL
Él
hablaba la lengua de los vientos
y
ella vestía el aroma de las flores.
Él
le traía rumores de los mares,
y ella
acogía en su faz la primavera.
Cuando
el viento negaba su presencia,
el
campo enmudecía y sus colores
eran
testigos mudos de un silencio
que
soñaba los vientos en su seno.
Aquella
tarde se escuchaban ecos
de
todos los rumores de los cielos.
El
campo florecía cuajado en gotas:
germinaba
en la luz el arco iris.
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