lunes, 14 de octubre de 2013

POR LA MISMA RAZÓN


Desde hace bastantes meses se han unido a la pequeña pandilla de andarines del sábado algunos amigos que parece que se sienten cada vez mejor en esa práctica de andar, respirar, admirar la naturaleza, charlar de todo un poco y de algunos asuntos un mucho, comer y beber lo que el cuerpo pide y volver satisfechos y con las ganas puestas para la próxima ocasión. Yo estoy encantado de que esto sea así, por mil razones y por mil y un motivos.
Uno de ellos, de carácter abierto y dicharachero, que responde al nombre del padre putativo de Jesús el Nazareno y da buenos frutos (adivina adivinanza), se suelta de vez en cuando con la coletilla de que es de derechas. Lo hace sobre todo cuando además subraya que alguna otra persona lo es más que él. Yo entonces me descuelgo rematando que no es fácil encontrar a alguien más de derechas que él mismo. Nos echamos unas risas y seguimos ruta como si tal cosa.
La anécdota -real- me sirve para cuestionarme de nuevo qué es eso de ser de derechas y ser de izquierdas. Constato tres realidades en torno de este asunto: a) Mucha gente, casi toda de derechas, afirma en público que no existen diferencias entre una tendencia y otra y que ese nominalismo es arcaico y está fuera de lugar. Observo, repito, que casi todo el mundo que tal cosa afirma es de prácticas e ideas de derechas. b) A la gente de izquierdas le cuesta mucho menos declararse perteneciente a tal denominación de izquierdas. c) Yo mismo me pregunto con frecuencia en qué lugar me sitúo (la respuesta viene siendo siempre la misma), y, sobre todo, por qué me lo pregunto con esa reiteración.
De las dos primeras observaciones puedo extraer consecuencias que me dicen que la gente de izquierda se halla más suelta o segura en sus convicciones; al menos públicamente. Por algo será. De la tercera extraigo la advertencia de que tal vez no tenga demasiado clara la diferencia entre una cosa y la otra. O tal vez que quiero seguir asegurándome un poco más.
Porque yo también me declaro de izquierdas públicamente. A veces lo hago incluso con exageraciones. Por ejemplo ante este amigo, a quien afirmo que, para que no haya dudas, yo me declaro no de izquierdas sino rojo, matacuras. Por supuesto que él -y cualquiera- debe entender que no deseo ningún mal, y mucho menos la muerte, para nadie, tampoco para los curas, entre los que tengo amigos, incluso en el ejercicio del obispado. Si me expreso así es por el contexto de confianza y para que nadie se llame a engaño acerca de mi pensamiento.
Pero una cosa es declararse y otra serlo en la práctica. Porque lo que a estas alturas realmente me interesa más no es el entramado de las ideas y mi interpretación de la situación en la que se halla el mundo sino la manera en la que yo personalmente podría contribuir a su mejora.
Y es este el asunto que me tiene más intranquilo y el que me hace preguntarme si, en la práctica, soy realmente de izquierdas. Lo quiero ser, pero ¿lo soy? Y me queda como una mala conciencia de no hacer todo lo que realmente tendría que hacer en la consecución de eso que es un deseo.
Porque repaso y pienso que alguna cosilla hago, pero son pocas seguramente y acaso me falta implicación en el día a día. ¿Cuáles son las causas que lo explican? La reflexión abarca niveles personales, familiares, de comunidad, de edad, de trabajo, de aceptación, de posibilidades, de adecuación de esfuerzos con posibles resultados, de mil cosas más.
Siento demasiado pudor como para quedarme aquí al desnudo desmenuzando ni siquiera uno solo de esos y de otros niveles. Pero los considero y los siento. Y repito que noto como un resquemor y como una conciencia un poco insatisfecha por todo lo que pudo ser y no es y por todo lo que es pero puede ser algo mejor.

Entre este decir de ser de izquierdas y esta falta de seguridad de serlo de verdad se me va el tiempo. Supongo que un poco como a todos. En mi caso por identificar de algún modo la izquierda con una concepción del mundo más justa y solidaria. Espero que en el caso de los de derechas sea por la misma razón. Ojalá.

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