INSTANTE
La
tarde se ilumina en mi terraza
cuando
pienso en la esencia de las cosas.
Vuela,
borracho, un pájaro dejando
sus
trinos en el aire; después viene
a
posarse, sereno, en el tejado;
y
en su tranquila paz sigue cantando.
Los
niños se divierten en la plaza,
ajenos
a los pálpitos de tiempo.
Suena
en eco la música más lejos,
como
un rumor de río o de una fuente.
Avivan
mi memoria los recuerdos:
las
cartas, los amigos, esos libros
que
dejaron su huella, los momentos
en
los que éramos dos y fuimos uno…
Las
cosas más sencillas son milagros
que
acompañan la gloria de este instante.
1 comentario:
Milagros sencillos pero efectivos, la vida lo es.
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