lunes, 4 de febrero de 2013

ME VOY A REPETIR (II)


Como el senado de sabios sabrá dar buena respuesta a las cuestiones (cuestión significa pregunta y no otras cosas) planteadas en la reflexión anterior, también lo sabrá hacer con alguna otra que no tenga que ver tan directamente con el funcionamiento interno de los partidos políticos.
 Porque la sociedad es la suma de muchos más elementos y asociaciones de elementos, y la educación y la ética son asuntos de toda la tribu.
Por ejemplo. Para dejarse sobornar tiene que haber personas o instituciones que sobornen. Por visualizar en el caso tan bochornoso de los últimos días, para que el impresentable chorizo tesorero del PP hiciera de su capa un sayo, y tuviera dinero para dar sobres a gogó, tuvo que recibirlo de algún sitio. Ya se conocen orígenes de ingentes sumas de euros. ¿Qué nombres están detrás de esas entidades? ¿Se unta lo mismo, en cantidad y en número de veces a todas las tendencias políticas? Parece que va a ser que no, y que Dios los cría y ellos se juntan. ¿Qué tipo de empresas son las que han aportado esas cantidades? ¿A qué actividades se dedicaban? ¿A qué tipo de familias tienen en sus consejos de administración? ¿Quién favoreció y con qué leyes la llamada liberalización de todo tipo de suelo? La luz ya se va haciendo para el que quiera hilar en el sentido común.
Y después del descanso para la comida y la siesta, para que el sanedrín se vuelva a encontrar descansado y ágil de mente. ¿Se conoce alguna empresa que no haga lo habido y por haber con tal de que sus negocios y sus cuentas de resultados mejoren? ¿No tendrá nada que ver con esto el sistema social y político en el que vivimos y que tanto aplaudimos, en el que el egoísmo y el beneficio están por encima de todo lo demás? ¿No convendría revisar ese sistema, por si al menos hubiera que domarlo un poco y hacerlo un poco más humano?
Y ya para los postres de la cena. ¿En qué medida analizan los ciudadanos el sistema en el que viven, en el que votan y al que sirven? ¿Cuál es su reacción después de este análisis, si es que lo realizan? ¿En qué medida son corresponsables?
Y por si quieren ponerle algún epílogo a sus consideraciones. ¿Qué es más importante, pillar y condenar a unos chorizos o modificar y mejorar la situación en la que estos chorizos se han aprovechado?
Para asuntos de iglesias, juzgados, medios de comunicación y otras zarandajas, podemos esperar a que nos den un curso otro día. Calculo que el enjuiciamiento de los implicados se alargará tanto que dará tiempo a todo tipo de consideraciones. Des resultado de ese enjuiciamiento no espero demasiado.

No hay comentarios: