jueves, 10 de marzo de 2016

"LA NUEVA EDUCACIÓN"


Ayer dediqué varia horas intensísimas a la lectura de una obra titulada “La nueva educación”. Su autor es César Bona, un maestro aragonés que describe con entusiasmo sus actividades renovadoras (o tal vez eternas) en el mundo real de la educación. Fueron horas intensísimas de emoción, de recuerdo y de reflexión.
El mundo de la educación sigue siendo mi asidero para muchas cosas. Porque ha sido mi mundo laboral y vocacional, porque creo que en él está la mejora de casi todo, y porque estoy seguro de que en mí sigue viviendo la vocación de enseñante y de profesor.
¿Por qué uno puede llegar a emocionarse hasta el lloro y la entrega total ante un escrito? La causalidad, como siempre, es múltiple; pero seguro que mucho tiene que ver el sentirse concernido por lo que allí se dice, por lo que te toca el nervio personal, la escala de valores en la que uno confía un poquito más y porque se refleja un mundo deseado por el lector. Todo eso sucedió ayer en la lectura de este libro de experiencias educativas y de otra forma de entender la educación.
Hay también un aspecto social importantísimo en ese mundo que afecta a todos, no solo al profesional de la educación. Un mundo con valores humanos, con principios de justicia y de colaboración, con bases de igualdad de oportunidades y con la curiosidad personal por bandera no puede ser tan deficiente como el que tenemos, tan egoísta, tan en competencia con el de al lado y tan lejos de uno mismo. Por eso es tan importante este oficio de educar.
Y, en mi caso, la nostalgia de mis años de ocupación en la enseñanza, la memoria de tantas actividades y de tantas otras que pudieron ser pero que dejaron de ser por deficiencias personales y por no atreverme a mandar al cesto de los papeles al sistema que tanto agobiaba y constreñía con temarios y con calificaciones sin sentido. Creo que mi actividad no era de las que más se sujetaban a las múltiples burocracias, pero siento también que pude hacer mucho más de lo que hice para dar a luz una educación más abierta y personal, más emprendedora y participativa. Y me duele pensar en todo lo que dejé por el camino. Como me dolían ya entonces tantas cosas porque era consciente de que todo se podía haber roto mucho más en el camino de la libertad y de la participación.
Copiaré, casi al azar, algunas palabras y frases del libro. Casi todos las firmaríamos, pero no estoy seguro de que todos las hayamos practicado con entusiasmo:
“Importancia de los maestros”; “Aprender de los compañeros y compañeras”; “Es un regalo ejercer esta profesión”; “Educación que sobre todo se basa en el factor humano”; “No hago nada extraordinario: solo ME DIVIERTO en clase”; “Trabajar más la empatía y la sensibilidad”; “Antes de enseñar hemos de saber escuchar”; “Los maestros somos unos privilegiados”; “¿Por qué, conforme crecemos, hemos de dejar de jugar?”; “Una gran responsabilidad: debemos estimular su creatividad, aguijonear su curiosidad”; “Se educa en cooperación y no en competitividad”; “Hay que educarles para que sean mejores de lo que eran antes”; “Contagiar una actitud positiva, de esfuerzo, de ilusión por lo que hago”; “Hay gente que está aprendiendo toda la vida porque, simplemente, tiene curiosidad”; “La educación es mucho más que meter datos en la cabeza”; “Tener en cuenta en CONTEXTO en el que vive cada alumno”; “A menudo se nos olvida que hemos sido niños o niñas”; “Implicar a los alumnos para que ellos se sientan parte de su aprendizaje…, invitarles a implicarse con la sociedad”; “Las puertas de las escuelas han de estar abiertas; no solo para que entren los niños, sino para que sus ideas salgan y transformen el mundo”; “Clave: que los niños vayan a gusto a la escuela”; “Educamos seres sociales”; “Hay que estimular a los niños a leer, no obligar a leer. No podemos convertir un placer en una obligación”; “Me dan igual los dieces que saquéis si no sois buenas personas: nunca podréis llevarlos a la espalda para mirar a los demás por encima del hombro”; “Una frase instalada en el pensamiento colectivo y que hay que revisar: En casa se educa y en la escuela se enseña”; “Si veis algo con lo que no estáis de acuerdo, ofreced una alternativa”; “Algo mágico sucede cuando a un niño se le ofrece la oportunidad de dar un paso adelante y comienzan a cambiar las cosas”; “Un héroe o una heroína es simplemente alguien que intenta que los seres a su alrededor sean felices”; “El tiempo pasa muy rápido. Los padres debéis disfrutar de vuestros hijos y los niños y las niñas han de disfrutar de su infancia”; “Somos emociones”; “Da igual las carreras que tengas o los idiomas que hables si no sabes respetar a los demás, si no sabes cómo reaccionar ante los estímulos que te lanza la sociedad o cómo intentar alcanzar tu propia felicidad”; “Entre estos niños que están en nuestras aulas está el futuro marido que sabrá respetar a su mujer o la persona que sabrá dar un paso adelante ante una injusticia e intentar cambiar las cosas”; “Escuchar es la llave que nos da acceso a nuestros alumnos”; “Notaremos una transformación si introducimos, por fin, la educación emocional en las aulas”. Y así podría continuar.
Sé que no es lo mismo la teoría que la práctica, que las edades no siempre son las mismas, que la sociedad está ahí con su escala de valores y con sus exigencias, que… hay lo que hay. Pero qué mundo tan distinto se intuye en estas palabras del libro.
Cómo recuerdo con emoción ahora las numerosas veces que sermoneaba a mis alumnos con aquella frase repetida: VAMOS A ESTUDIAR PARA SER UN POCO MÁS FELICES. Qué caras de asombro las suyas al principio y que repetición tan emocionante cuando me las repitieron en un libro de regalo con motivo de mi jubilación. Cuántas cosas pude hacer y no hice, a pesar de todo.

César Bona ha sido seleccionado como “uno de los mejores cincuenta maestros del mundo”. Se lo merece. Me levanto y le hago la ola. Enhorabuena. Estoy seguro de que hay por ahí muchos maestros similares y con un entusiasmo parecido. El que merecen esas personas pequeñitas que crecen en busca de un mundo mejor para ellos y para todos.

No hay comentarios: