DE BEBÉ A NIÑA Y DE PRINCESA A REINA
(Para Sara, en su segundo cumpleaños)
Porque el tiempo ha pasado a ser tu tiempo
y tus pronombres representan nombres,
porque determinar es necesario
para un sintagma que se torna único,
porque se halla en tu cuerpo la materia
sorprendida de sí con tu hermosura,
porque ya son dos velas las que encienden
de luz toda la casa, ya tu casa,
porque cuando me miras me ves otro
y yo te veo distinta y más tú misma,
porque ya vas y vienes a tu antojo
por los espacios limpios que te marcas,
porque esos ojos bellos cuando miran
invitan a dormir en sus pupilas,
porque vas conociendo que a unos días
suceden otros días simplemente,
porque el espacio es amplio y tú lo pisas
con pies que dan sentido a los caminos,
porque llenas de arena cualquier tarde
y de contento y risa mi semblante,
porque sabes sumar bien las presencias
y la ausencia la anotas con tristeza,
porque tienes perfil de colegiala
en las últimas fotos de tu álbum,
porque arrugas el gesto si no entiendes
cualquier palabra extraña en tus oídos,
porque tienes dos trenzas y ya puedo
llamarte sin reparo “mi trencitas”,
porque te veo más alta cada día
y más abierta al mundo en tus palabras,
porque, en fin, vas tejiendo lentamente
un refugio con toda tu experiencia.
Por eso y por las cosas de la vida
que vas a compartir con mi presencia
-espero que me invites a unas cuantas:
me conformo con verte y sonreírte-,
déjame que hoy levante mis dos manos
por tus dos años tiernos, por tu ascenso
de bebé a niña hermosa, de la niebla
a la feliz ternura de tu propio espacio.
1 comentario:
Buenas noches, profesor Gutiérrez Turrión:
Felicidades -con retraso- a la pequeña Sarita.
Precioso su poema. ¡Qué orgullosa estará su nieta cuando sepa leerlo y entenderlo!.
Vuelvo a poner un enlace -directo- con la misma canción del año pasado.
Sol, solecito
Saludos.
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