CAMBIO
DE BOZALES
Hoy toca una de cal (¿o
de arena?). Para ponerle un poco de distensión al asunto.
CAMBIO
DE BOZALES
Admirábase un perro por
las calles,
viendo que, en las aceras,
los humanos,
en lugar de llevarlos de
la mano,
se ponían a sí mismos los
bozales.
No me parece vano este
detalle,
le contestó otro perro, cabizbajo,
observando también el
mismo caso:
será, tal vez, para
taparse el aire.
Estos humanos son
incompresibles:
siempre negándonos
cualquier intento
de ladrar y correr a
nuestro gusto
y ahora se tapan y nos
dejan libres:
algún virus les corre por
el cuerpo
y quieren evitar
cualquier disgusto.
Día 16 de confinamiento. Ánimo.
1 comentario:
Está muy bien el símil del bozal para los humanos, un soneto gracioso, Antonio, aunque en realidad pienso que a algunos les haría falta.
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